River volvió a decepcionar con su bajo nivel y, más allá de la polémica de la noche, preocupa no haber mejoría en el equipo.
Que el árbol no tape el bosque. Van cinco partidos y River no encuentra rumbo. En la noche del domingo, el “Millonario” fue ampliamente superado por San Lorenzo, que desaprovechó sus chances por demás.
Álvarez Balanta fue el único jugador de campo que intentó ser diferente. Tuvo sólo un error, fue el mejor de la defensa y cuando pudo pasó hacia adelante para tratar de complicar.
El encuentro fue malo de principio fin. River nunca se halló en el campo de juego, no encontró la salida y dio ventajas para que el local hiciera lo que quisiese.
Marcelo Barovero se encargó de que la historia no sea peor. Tapó cada llegada de San Lorenzo y se mostró seguro. Cuando el árbitro otorgó el penal, el arquero lo tapó pero insólitamente se volvió a ejecutar y no pudo detenerlo. En las imágenes se puede ver que «Trapito» no se adelanta.
Más allá de la polémica, no hay que dejar de remarcar lo más importante: el flojo rendimiento de River en lo que va del Torneo Inicial.
Por Juliana Palleros –
