Seis años se van a cumplir del último grito de campeón y es imposible no ilusionarse. Cuatro finales quedan, cuatro partidos que debemos ganar para que este plantel le regale otra alegrÍa al pueblo millonario, esa alegrÍa que tanto merecemos, que tanto anhelamos.
El próximo domingo 21,30 hs. debemos viajar a Bahía Blanca a enfrentar al equipo de Perazzo, la primer final. El conjunto aurinegro se encuentra en un gran momento, con una racha de dos victorias consecutivas, de la mano de la gran actuación de su delantero Valencia quien convirtió cuatro goles en los últimos tres partidos. Olimpo se encuentra a tres puntos de salvarse del descenso y pretende bajar a River de la punta.
En el local saldrían a jugar Champagne, Gissi, Furios, Moiraghi, Ferreyra; Luguercio, Musto, Blanco, Gil; Cerrutti y Valencia. Es un equipo que sabe a lo que juega, con un goleador que viene afilado, tiene a Musto como un capitán por el cual pasan todas las pelotas al momento de atacar, un estadio que conocen a la perfección de tan solo 94 por 69 metros y 18 mil hinchas que los alentarán e incluso aún sueñan con pelear por el campeonato en un torneo tan irregular.
Enfrente estará este River, que quiere seguir en lo mas alto del campeonato y sabe que, más que nunca: ¡para ser campeón debe ganar!
Por Eitan Benzaquen
