A poco más de tres meses de la asunción de Gallardo como DT de River, y con un puñado de partidos encima (dos por Copa Argentina, seis por Campeonato Argentino y uno por Sudamericana) el equipo mostró un nivel y una intensidad de juego que no se veían hace tiempo dentro del club, e incluso en el fútbol argentino. Esto generó una agradable sorpresa para el público millonario y para el medio del fútbol en general, quién poco conocía al “Muñeco” en esta faceta.
El once inicial mostró en éste tiempo un alto nivel de juego: ofensivo, arriesgado, con mucha movilidad y presión alta para recuperar la pelota. Los resultados hasta ahora son satisfactorios, ya que River avanzó en dos fases de Copa Argentina, ganó su primer partido por Sudamericana, y está puntero e invicto en el campeonato con 16 puntos sobre 18 posibles. En total, el equipo de Gallardo afrontó 9 partidos, convirtió 16 goles y recibió sólo 2.
El «Muñeco» es el primer técnico elegido por esta dirigencia dentro de su proyecto futbolístico, ya que había heredado a Ramón tras ganar las elecciones. Luego de obtener el título, el plantel sufrió algunas bajas, aunque también tuvo los regresos de Sánchez y Mora, y las incorporaciones de Pisculichi y Chiarini, quedando conformado un plantel no tan extenso al cual Gallardo supo no sólo adaptarse, sino potenciar.
Aunque pasó poco tiempo, vale la pena remarcar el buen juego que mostró River, algo que no se veía desde hace años en el club (quizás desde la década del 90), y que significó una sorpresa para un fútbol argentino que muestra mucha especulación en los planteos tácticos. La primer gran seguidilla de partidos superó las expectativas de todos los hinchas “millonarios”, quienes esperan seguir disfrutando del nivel del equipo, y por qué no volver a festejar un nuevo título.
Por Juan Manuel Marino – @JuanmaMarino
