Isotipo_Figuras3
Javier Garcia Martino / Photogamma
Javier Garcia Martino / Photogamma

Ramiro Funes Mori fue de mayor a menor. Cometió un error garrafal que pagó muy caro y lo condicionó hasta el final del partido. Alejado de su rendimiento habitual, esta noche no fue Funes Mori.

Del #NoFueCorner en la Bombonera al partido de esta noche hay una distancia abismal. Es que Ramiro Funes Mori tuvo una noche fatídica, de esas que no tenía hace muchísimo tiempo.

Iban 46 minutos de la primera etapa cuando cometió un error que lo condicionó para el resto del partido. Quiso salir jugando desde el fondo, enganchó para adentro y pagó muy cara la herejía de todos los manuales futboleros. Diego Vera le pellizcó el balón y fusiló a Barovero.

El aceptable primer tiempo de Ramiro se fue al tacho desde lo mental. Es cierto que ganó mucho en el juego aéreo e intervino en un cierre estupendo que pudo ser el empate de Estudiantes. Sin embargo, en el mano a mano perdió más de lo habitual y se vio varias veces desbordado por su sector. Raro en él, que hasta aquí venía siendo uno de los puntos más altos del equipo de Gallardo.

El resultado a favor terminó «maquillando» una actuación rápidamente olvidable. Esta noche, #NoFueFunesMori.