(INCLUYE AUDIO) En diálogo con LA MÁQUINA RADIO, el arquero de River y figura en la Selección Sub-20 se refirió a su presente, la propuesta del Real Madrid y el sueño de defender el arco más emblemático del fútbol argentino.
Su temple indestructible hace que todo lo que se dice de él, para bien o para mal, no lo afecte en lo más mínimo. En tiempos donde las tentaciones suelen producir «mareos» y los más jóvenes pierden el norte con facilidad, Augusto Batalla mantiene los pies sobre la tierra y lo demuestra dentro y fuera de la cancha, con actuaciones brillantes y palabras centradas.
«Lo vivo con mucha tranquilidad. Trato de seguir concentrado en lo que tengo que hacer, que es jugar y poder rendir donde me toque estar», son sus primeras palabras cuando atiende el llamado de LA MÁQUINA RADIO y responde sobre esa capacidad innata para manejar situaciones complejas.
Esa personalidad de hierro lo convirtió en un referente, tanto en River como en la Selección Sub-20, donde fue un líder indiscutido dentro del vestuario. Sus arengas en las previas se viralizaron a partir de algunas grabaciones. Augusto, desde su humildad, agradeció a sus compañeros: «Fue una linda charla, fue muy emotiva. Lo bueno es que sirvió y los chicos se sintieron motivados para poder salir a la cancha con muchas ganas». Además, agregó:«Es mi personalidad. Lo hago porque me sale de adentro y tengo un grupo de compañeros que me deja hacerlo y se siente muy cómodo con que yo lo haga».
Mucho se habló y se hablará sobre el interés latente de pasar al Real Madrid. ¿De forma definitiva o a préstamo? ¿Ahora o a mitad de año?: «Todavía no hablé con mi representante. Estoy aprovechando estos días de descanso con mi familia. Es una posibilidad que está, la maneja él. Es una muy linda oportunidad. Pero soy jugador del club y tengo la cabeza puesta en River», admitió el arquero.
Más allá de sus ganas de atajar en el club millonario, la posibilidad de jugar en un gran de Europa no se da muy seguido para un jugador que no sumó minutos en Primera. Por eso, el futuro de Augusto es todavía una incertidumbre: «El sueño de jugar en el arco de River siempre está. A veces uno tiene que tomar decisiones por cuestiones deportivas, pero el sueño siempre está. Es muy difícil irse del club, pero uno tiene que pensar también en lo deportivo. Si lo que te ofrecen es positivo, hay que analizarlo», remarcó Augusto.
Por último, volviendo al Campeonato Sudamericano Sub-20, explicó cómo vivió el encuentro ante Uruguay en un terreno hostil, donde los juveniles argentinos superaron un verdadero examen de carácter: «Se vivió con mucha tensión. El Centenario tenía más de 60 mil personas. Fue hermoso poder estar en esa especie de final. Si lo hubiese soñado no hubiese pasado, porque fue perfecto. Estábamos a un punto de ser campeones y con un estadio colmado alentando al equipo rival, mejor no podía ser», cerró Augusto.
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