Leonardo Ponzio volvió a la titularidad y fue uno de los rendimientos más regulares en un partido flojo del millonario, que volvió a ganar y culminar con la valla en cero.
A este River no le sobra nada. En un contexto de austeridad, la figura no pudo ser otra que uno de los jugadores que más raspa, más interviene en la fricción y aporta lucha a un mediocampo que venía desnudando falencias y debilidades en los momentos críticos de los partidos.
Esta tarde ante el «Tomba», River no estuvo fino con la pelota, pero encontró a Leo Ponzio a uno de los futbolistas más claros en la distribución del balón. Dio 39 pases correctos y sólo 4 incorrectos. Aportó, además, 5 recuperaciones de los 13 quites que tuvo el equipo de Gallardo a lo largo del encuentro.
River no brilló ni brindó espectáculo. Mostró una versión más austera y utilitaria. Y tuvo en Leo Ponzio una figura acorde al momento de un «millonario» que llega con lo justo a fin de mes.
