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IMAGEN: Jorge Quiroga
IMAGEN: Jorge Quiroga

(INCLUYE AUDIO) En diálogo con LA MÁQUINA RADIO, Norberto Osvaldo Alonso recordó el partido homenaje en el Monumental, a 28 años de su despedida. Además, destacó la jerarquía que tenía el equipo del ’86 y afirmó que ese plantel hoy podría vencer al Barcelona.

Pasaron pocos minutos de las 20 horas. El protagonista en cuestión sale de una reunión, lee el mensaje de la producción de LA MÁQUINA RADIO y responde de inmediato: «Llamame que te paso otro número y hacemos la nota». No se esconde. Como cuando entraba al campo de juego y pedía siempre la pelota, aunque fuera blanca o anaranjada. Ante cada consulta, el ídolo de River accede y responde sin pelos en la lengua.

El motivo de la comunicación es un nuevo aniversario del partido homenaje al emblemático 10 de La Banda. Al «Beto» se le entrecorta la voz, pero avanza con su relato y refleja en palabras esa imagen mental que lo conmueve desde hace 28 años: “13 de junio de 1987. Me regalaron ese partido despedida que lo he llevado para siempre en el corazón, fue algo impresionante.  80 mil personas. Me llena de emoción”, recordó Norberto Alonso. “Soy un agradecido porque fue uno de los primeros partidos que se despidió a una persona. Es un agradecimiento mutuo. La gente viene cuando vos le regalaste cosas, alegrías, tanto en los resultados deportivos como en el juego. La gente a todo eso agradece”, agregó.

El «Capitán Beto» está contento, metido, se siente parte de River. Está en SU casa. Disfruta del momento institucional y deportivo. Trata de ser cauto en sus expresiones y no meter las narices donde no le corresponde. Por eso, al ser consultado sobre los futbolistas que buscan emigrar del club, tira una gambeta y sale bien parado: “De estos muchachos no te puedo decir nada porque los representantes están al lado, están los familiares que se meten y medio que los confunden. Yo les digo que están en la mejor institución del mundo y se quieren ir, que se yo…no te puedo decir el pensamiento de estos jugadores de hoy”.

Pero lo que no puede evitar es hablar de fútbol: “El plantel está bien. Lógicamente que si se te va alguno de la columna vertebral lo vas a sentir. Hasta el final de la Copa Libertadores no se te tiene que ir ninguno. Después hay que ir a pelear el campeonato, River siempre tiene la obligación. Primero por respeto a la institución, y después porque tenemos que ir por todo”. ADN 100% River, por si no quedaba claro.

En la discusión futbolera, la referencia inevitable es el glorioso equipo del ’86. La comparación es odiosa, pero este equipo de Gallardo remite mucho al carácter que tenía aquél plantel. Sin embargo, para el «Beto» las equivalencias no existen. Y es categórico: “El equipo del ’86 podía ganarle a cualquiera. Los rumanos sacaron al Barcelona, eran muy duros, pero consiguimos un triunfo y trajimos la Copa». En el juego de la imaginación, el ídolo de River atraviesa las barreras temporales y se le anima a Messi, Neymar y companía: «El Barcelona sería difícil para el equipo del ’86, pero le podríamos ganar tranquilamente”, aseveró y argumentó: “Nosotros teníamos un equilibrio terrible en defensa, en el medio y adelante. Zapateábamos un poquito en la mitad, después se los entregábamos muertos a los de atrás, teníamos un gran arquero. Es muy difícil que puedan superar a ese equipo”.

Para finalizar la charla, el «Beto» habló de uno de los suyos. Del «Payaso» de Río Cuarto, que hoy circunstancialmente no viste la #10, pero que la lleva marcada a fuego en su talento: “Me puse muy contento, porque lleva un sello de distinción en los toques. Te das cuenta, tocando cuatro o cinco pelotas lleva el sello del Pablo Aimar que se fue, que triunfó afuera. Realmente es un diferente, es bien de la escuela de River». Y concluyó con un deseo: «Sería una alegría también si vuelve Saviola”. Si lo pide Alonso, PALABRA SANTA.

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