Isotipo_Figuras3

Mora Alario Japon
En la mañana Argentina, River derrotó al Sanfrecce japonés por 1-0 y logró acceder a la final del mundial de clubes. Lucas Alario anotó el único tanto del encuentro.

Si algún argentino no vió el partido podríamos decirle que se ganó y nada más. Otra cosa no se observó. No hubo ideas. ¿Por que? Seguramente porque no tenían referencias del rival y eso complicó el encuentro más de lo pensado.

Durante los primeros 45′ River trató de ser protagonista pero no pudo. Con una defensa dubitativa y una soberbia actuación de Barovero, los dos llegaron parejos desde el resultado al segundo tiempo. Pero si el millonario no daba un giro de 360 grados, mañana ya estaría pensando en definir por el tercer y cuarto puesto, algo que hasta ese momento no parecía muy injusto.

El comienzo de la segunda etapa, y para dar ese giro completo, exigía el ingreso de Lucho Gonzalez y Tabaré Viudez, jugadores que son sinónimos de creatividad para avanzar en ataque y llegar al gol. La alegría llegó nuevamente con Lucas Alario como gran actor de los gritos trascendentales en River.

Párrafo aparte para los dieciocho minutos restantes, que trató de sostener la diferencia obtenida. Sólo eso y nada más para el millonario que espera la final soñada. ¿Será frente al Barcelona?