Los hinchas de River ovacionaron a Barovero y pidieron que no se vaya. En el Monumental abundaron los buzos verdes y algunas leyendas pidiendo que Trapito siga después de junio en la institución.
El «operativo seducción» tuvo un nuevo capítulo. Más allá de las declaraciones de Rodolfo D’Onofrio en la semana, las charlas con algunos dirigentes y las ganas de todo el plantel y cuerpo técnico para que siga en River después de junio, esta tarde/noche fue el turno de los hinchas.
El Monumental habló, como sucede siempre que Trapito sale al campo de juego a realizar la entrada en calor, o cada vez que la voz del estadio anuncia su nombre, o el mismo Barovero enfila para el arco luego del sorteo en el medio de la cancha.
Pero esta vez hubo un dato de color: miles de simpatizantes lucieron en las tribunas su clásico buzo verde, inmortalizado por la imagen del penal atajado a Giglioti y el nacimiento de un idilio sin fecha de vencimiento. «Trapito no se va», fue el canto de guerra de los hinchas, que ovacionaron una vez más al arquero y sumaron un poroto para que el arquero del millonario revea su decisión.