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Alario Japón

En conferencia de prensa, el goleador de La Banda afirmó que no tiene problemas en salir del equipo si el entrenador observa que un compañero está mejor. Además, negó que existan ofertas del fútbol europeo y desacreditó algunas versiones periodísticas que hablaban de un castigo disciplinario por parte de Marcelo Gallardo.

Como sucede cada vez que se acerca el final de un semestre y el inicio de un nuevo mercado de pases, la danza de nombres, ofertas y sondeos se convierten en materia corriente. Sin embargo, Lucas Alario despejó este mediodía que exista la chance de emigrar al fútbol europeo, al menos por ahora:  «Soy bastante de abstraerme de esas cosas. Hoy estoy en River, y le tengo que agradecer porque me hizo vivir momentos muy lindos. Uno siempre está predispuesto para esta camiseta», aseguró el goleador. «No soy de pensar muy a largo a plazo. Sabemos que el libro de pases se abre dentro de poco, pero hoy estoy en River. Desde el primer día que estoy acá me sentí muy cómodo, mis compañeros me recibieron de la mejor manera, he conseguido cosas que en mi vida se me cruzaron de la cabeza. Eso no depende de mi», agregó.

En conferencia de prensa, el atacante fue consultado también por su salida del equipo titular en una instancia decisiva como fueron los octavos de final de la Copa Libetadores: «Con respecto a si venía jugando o no, es responsabilidad del técnico. A lo mejor ve otro compañero que está bien, él nos ve todos los días acá, comparte mucho tiempo con nosotros y sabe qué es lo mejor para el equipo. Desde que llegué trato de jugar desde el lugar que me toque. En los últimos partidos me tocó jugar de entrada, siempre rindiendo al máximo para el equipo», admitió.

Por su parte, desacreditó algunas versiones que instalaron un supuesto castigo del entrenador por cuestiones disciplinarias: «Sabemos lo que mueve River y la prensa que tiene un equipo grande. A lo mejor un poco de sorpresa porque mi familia, mis compañeros, los que venimos a entrenar día a día saben como soy. Lo tomé como algo feo en lo personal, pero son opiniones como tantas que tiene uno», reconoció.

A la hora de hacer un balance del último semestre, el goleador aseguró: «Nos vamos con un sabor amargo, malo, porque los objetivos eran otros, pelear arriba en el torneo y no se logró. Después se apostó todo a la Copa, pero por esas cosas que tiene el fútbol no pudimos pasar a la siguiente ronda».

Para finalizar, reiteró que su cabeza está en River y que venga que venga en este mercado de pases, seguirá luchando para defender la camiseta del Más Grande: «En los entrenamientos hay que dar exámenes para tratar de estar dentro del equipo y después demostrar en los partidos los fines de semana. Siempre seguiré por el mismo camino que el primer día que llegué, a través del laburo, trabajando y seguir aprendiendo, dando lo mejor para el equipo desde el lugar que me toque. Ese es mi pensamiento. Con el trabajo, el sacrificio y la humildad que le ponga uno, puede conseguir las cosas que se proponga «, concluyó.