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IMAGEN: Alejandra Colmenares Prieto II La Máquina
IMAGEN: Alejandra Colmenares Prieto II La Máquina

(BOGOTÁ – ENVIADOS ESPECIALES) En un partido chato y con pocas emociones, River rescató un empate en la altura de Bogotá y definirá la Recopa en casa. Ponzio, Maidana y Moreira, los puntos altos en el equipo de Marcelo Gallardo.

Había que sufrir lo menos posible y salir con aire de los 2.600 metros de alturas que tiene El Campín. Y desde ese punto de vista, lo de River fue casi perfecto. Es que el conjunto millonario controló en gran medida el juego disputado esta noche en la capital colombiana, y se llevó un empate que le sienta mucho mejor para la revancha en Buenos Aires.

En la primera etapa, el Más Grande tomó la iniciativa y sin mucho más que Independiente Santa Fe, se las arregló para llegar con algo de peligro al arco de Robinson Zapata. Las dos primeras situaciones fueron casi un calco, una de la otra: presión alta, recuperación, toques de primera y remates desde afuera del área. Primero probó Sebastián Driussi, luego Gonzalo Martínez. En ambas, el arquero santafereño respondió con buenas atajadas.

Más allá del ímpetu inicial, Santa Fe apostó al error del rival. No acertó de contragolpe, pero estuvo algo más afilado en la pelota parada y la buena pegada de Omar Pérez. Por esa vía, y también por un error en la salida de Augusto Batalla, el conjunto local estuvo cerca de abrir el marcador, pero Leo Ponzio salvó de manera providencial sobre la línea.

En el complemento, la historia fue otra. Aunque River intentó manejar el balón, y por momentos lo hizo con mucho criterio, evidenció cierto desgaste físico. Lejos del arco de Zapata, le costó construir y llegar con cierta nitidez a la zona de peligro. Por su parte, el equipo de Gustavo Costas tampoco se animó a romper líneas. Tuvo apenas una situación de gol, a través de un remate cruzado de Humberto Osorio, pero esta vez Batalla respondió con mucha seguridad.

El partido se fue desvaneciendo con el correr de los minutos, cosa que benefició a River, que se fue del Campín conforme con el resultado y, en parte, con el rendimiento. La llave está más que abierta y ahora toca definir en casa.