El delantero de River ingresó en el segundo tiempo por Lucas Pratto y cumplió su sueño: debutar con la camiseta de la Selección Argentina. Lo hizo en una posición poco habitual, para aguantar el triunfo en el último tramo del encuentro ante Uruguay.
Es la Riverción, en su máxima expresión. Amén del excelente nivel de Ramiro Funes Mori, de la entrega habitual de Javier Mascherano y de la presencia de varios «ex», el encuentro de anoche ante Uruguay tuvo un condimento más que especial.
Es que Lucas Alario ingresó a los 25 minutos del complemento en lugar de Lucas Pratto y cumplió uno de sus grandes sueños: debutar con la camiseta del seleccionado nacional. Lo paradójico del asunto es que la indicación de Edgardo Bauza fue que se ubicara como volante por la derecha, además de ser uno de los cabeceadores «defensivos» en cada pelota parada del rival.
Más allá de la extrañeza, el Pipa cumplió su papel a la perfección y tuvo un buen rendimiento, más allá de no contar con situaciones netas de gol. Otro motivo de orgullo para los hinchas de River y para una institución que sigue nutriendo al combinado nacional.
