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En un primer tiempo con pocas acciones en las áreas, River fue pura efectividad y vence a San Martín de San Juan por la mínima diferencia. Lucas Alario, de cabeza, anotó el único tanto de la primera etapa.

Pasaba poco. Muy poco en el Monumental. Dejando de lado el emotivo homenaje a Jonatan Maidana, en la previa y en el minuto 2 del partido, no pasó casi nada. Es que River y San Martín de San Juan jugaron un primer tiempo de ajedrez. Incluso el conjunto de Lavallén fue un poco más incisivo en los metros finales y obligó a dos intervenciones de Augusto Batalla.

Sin embargo, River tiene jerarquía individual. Y en la primera que llegó al fondo, abrió el marcador. Y lo hizo a través de su emblema goleador. Luego de un gran centro de Nacho Fernández, Lucas Alario cambió la dirección del balón con un frentazo y puso al millonario en ventaja.

Antes y después, fue muy poco lo que generó el equipo de Marcelo Gallardo, que no encontró espacios ni demasiada lucidez a la hora de atacar. Sólo por ese gol (y por Alario) River gana en el Monumental y es más puntero que nunca.