Sergio Marchi, presidente del gremio que representa los intereses de los futbolistas profesionales, puso en duda el inicio de la flamante Superliga por la deuda que mantienen los clubes con los jugadores: «El fútbol es muy dinámico, pero como está hoy, sería una gran irresponsabilidad que comience el torneo», aseguró.
La crisis eterna del fútbol argentino no vislumbra solución. Se actualizan contratos televisivos, cambian algunas reglas del juego, pero el estado de situación parece repetirse hasta el hartazgo: clubes endeudados entre sí, con la AFA y con sus propios futbolistas. La suma ronda los 500 millones de pesos. Un descalabro si se contemplan los nuevos ingresos por televisación.
Esta tarde, Sergio Marchi dialogó con ESPN FC y planteó la gravedad de la situación: «El fútbol es muy dinámico, pero como está hoy, sería una gran irresponsabilidad que comience el torneo. Queremos una etapa distinta. No se puede empezar una etapa con deudas. Acá hay deudas de todo tipo. En el día a día nos pasan cosas muy curiosas. Un club, uno de los máximos deudores, termina firmando y fotografiando a un futbolistas, cuando le deben tres o cuatro meses a todo su plantel», remarcó.
«El que no paga termina con un premio, y el que paga termina perdiendo la categoría», agregó el presidente del gremio que representa a los futbolistas. Y planteó cuál sería una solución a futuro: «Lo que hay que lograr son mecanismos de control, mecanismos reglamentarios para eliminar el problema colectivo, y así poder aislar al club que provoca el problema», indicó.
De esta manera, Sergio Marchi planteó la posibilidad de una huelga impulsada por Futbolistas Argentinos Agremiados y puso en duda el inicio de la flamante Superliga.
