River arrancó con todo en el complemento y se puso 2 a 0 con goles de Milton Casco y Rafael Borré, pero se durmió y Atlético Tucumán terminó empatando. El millonario dejó escapar otra chance en casa.
El millonario dejó escapar otro partido insólito. Hizo lo más difícil: ponerse en ventaja y marcar inmediatamente el segundo. Pero durmió la siesta y no lo supo sostener.
Luego de unos primeros 45 minutos que pasaron sin pena ni gloria, en el complemento llegaron todos los goles. A los cuatro minutos, luego de una buena presión en la salida de Atlético Tucumán, Jorge Moreira metió una puñalada al corazón del área, la jugada se ensució con un rebote y apareció Milton Casco en soledad en el segundo palo para poner al millonario en ventaja.
Cuatro minutos después, Nico De La Cruz metió un pase en cortada, Carlos Auzqui quedó mano a mano con el arquero, pero prefirió habilitar a Rafael Santos Borré, que ingresaba solo desde atrás y sólo tuvo que empujarla.
Minutos después, Exequiel Palacios remató desde afuera y estalló el travesaño. El segundo tiempo parecía a favor de River. Sin embargo, a los 19 minutos Luis Rodríguez aprovechó un error de Alexander Barboza (fue flojo a trabar) y La Pulga estableció el descuento, en el momento menos esperado.
Diez minutos después, luego de una jugada que nació en los pies de La Pulga, David Barbona amagó, desparramó a Milton Casco por el área y habilitó a Ismael Blanco, que solo tuvo que empujar el balón con el arco libre.
Un baldazo de agua en el Monumental. Un quedo inexplicable del elenco de Marcelo Gallardo, que pudo salir más golpeado si la Pulga Rodríguez acertaba al arco en una de las últimas chances que tuvo en el partido. Tercer empate consecutivo. Una igualdad con sabor a desilusión.
