Franco Armani le pidió a la dirigencia de Atlético Nacional que no ponga palos en la rueda y permita su salida para atajar en River. En esta nota te contamos las cinco claves que permiten entender por qué el arquero de Casilda se va del club en el que es ídolo.
- EL MUNDIAL A LA VUELTA DE LA ESQUINA. El arquero de Atlético Nacional venía tramitando la doble nacionalidad con la seria intención de atajar en la Selección Nacional de Colombia. Ídolo en el verde de Medellín, figura clave en la obtención de sus últimos títulos y el arquero más destacado de la Liga, todo hacía suponer que desde la Federación Colombiana de Fútbol iban a hacer los esfuerzos necesarios para que la nacionalización saliera sin inconvenientes. Sin embargo, la presencia de un arquero extranjero en el arco que alguna vez defendió René Higuita encendió el debate del público futbolero (y no tan futbolero también). Hasta el propio David Ospina, arquero del elenco que dirige José Néstor Pekerman, se pronunció en contra de que un futbolista «foráneo» defendiera los tres palos de su selección. El desgaste fue tal que hoy Franco Armani considera que es más fácil ganarse un lugar en el seleccionado argentino si mantiene su nivel en el arco de River. ¿Hubo un llamado de Jorge Sampaoli que ayudó a tomar la decisión de volver al país?
- FINAL DE UN CICLO EXITOSO. Atlético Nacional venía dulce. Del 2013 a esta parte, fue protagonista de casi todos los torneos que se disputaron en Colombia. También pisó fuerte en el plano internacional. Sin embargo, el segundo semestre del 2017 fue algo esquivo para el verde, que no encontró resultados ni el estilo de juego que lo llevó a lo más alto del fútbol sudamericano. Esto provocó la renuncia del entrenador Juan Manuel Lillo luego de quedar sin chances en la Liga Águila. Los referentes del plantel apoyaron el DT, pero la dirigencia desoyó el pedido de los futbolistas y buscó al argentino Jorge Almirón, técnico saliente de Lanús.
- EL SUEÑO DEL ‘PIBE’. «El tren pasa una sola vez». Frase muy trillada en el fútbol. Sin embargo, para Franco Armani no fue tan así. River lo fue a buscar en diciembre de 2015, cuando era un hecho que Marcelo Barovero dejaba el arco del Más Grande al finalizar el Mundial de Clubes. Armani «coqueteó» con el millonario hasta que terminó acordando con Atlético Nacional una mejora de su contrato. Marcelo Gallardo no suele dar segundas chances a los futbolistas que no muestran demasiado interés en vestir La Banda roja. Sin embargo, las apuestas en el arco salieron mal y dos años después, el Muñeco volvió a insistir por el casildense, que esta vez sí mostró compromiso, predisposición y ganas de atajar en el club del que es hincha desde pequeño. El sueño del ´pibe’.
- UN PLANTEL QUE COMIENZA A DESARMARSE. El malestar luego de la partida de Juan Manuel Lillo no sólo golpeó a Franco Armani. Algunos referentes del plantel, entre ellos Macnelly Torres, Alexis Henríquez y Dayro Moreno (su préstamo finalizó en diciembre), están con un pie afuera de la institución. El plantel exitoso que fue protagonista de casi todas las competencias en las que participó comenzó a desarmarse, más allá de los pedidos de Jorge Almirón y de la incorporación, a préstamo por seis meses, de Giovanni Moreno. Otra de las claves para entender la salida del arquero.
- RELACIÓN QUEBRADA. La relación de Franco Armani con Andrés Botero, presidente de Atlético Nacional, está muy lejos de ser la ideal. Los desaciertos dirigenciales, sumado a varias promesas incumplidas y algunas declaraciones en público que terminaron exponiendo al arquero, hicieron que el argentino cambiara de opinión y que hoy manifestara las ganas de «cambiar de aire», cuando hace unos meses atrás había asegurado que se quería quedar a vivir en Atlético Nacional.
