(INCLUYE VIDEO) Marcelo Gallardo afirmó que la remontada anímica y futbolística de sus dirigidos obedece al triunfo conseguido en la Supercopa Argentina, partido que sirvió para «desbloquear» al plantel desde lo mental. Además, palpitó el encuentro ante Defensa y Justicia y explicó el sentido de la ironía que pronunció luego de la victoria ante Boca en Mendoza.
En conferencia de prensa, el Muñeco palpitó el encuentro ante Defensa y Justicia: «Un domingo atípico, en un horario atípico para nosotros, pero con buenas sensaciones de lo que vivimos en estos últimos diez días, con un plantel entusiasta. Esperamos ir a Florencio Varela a hacer un buen partido. Va a ser un partido abierto, por lo que propone Defensa. Es un buen equipo, que intenta jugar y tiene ambiciones ofensivas. Intentaremos seguir con esta dinámica que traemos, que nos pueda seguir haciéndonos funcionar mejor. Esa es la idea», indicó el entrenador millonario.
Consultado por las respuestas anímicas y futbolísticas que mostró su equipo luego de vencer a su eterno rival, el DT reconoció: «De repente una victoria tan importante como la que sucedió en esa Supercopa, que teníamos pensado como el partido más importante del semestre después de una situación bastante mala en lo futbolístico, pudimos enfocarnos y ganar el partido más importante. Eso nos hace desbloquearnos y que el equipo pueda empezar a fluir de otra manera, como sucedió contra Belgrano. Ese es el camino, que las cosas empiecen a fluir naturalmente», explicó.
Después de mucho tiempo, el Más Grande volverá a disputar un encuentro oficial en horario matutino. Al respecto, el técnico de La Banda afirmó: «Habrá que empezarse a habituar a estas situaciones. Después, tomaremos los recaudos necesarios de dormir temprano, como un horario normal de entrenamiento. Tenemos un largo viaje también, de una hora hasta Varela. Debemos preparar el partido de la mejor manera posible», remarcó.
Mucho se habló en la previa del superclásico de supuestos problemas internos dentro del vestuario. Para el Muñeco, lo externo no alteró el buen clima de sus dirigidos y esa es una gran virtud del grupo que comanda: «Cuando los problemas no existen, es mucho más fácil enfocarte en los objetivos reales. Los jugadores para mí son todos referentes, porque un equipo convive, se entrena y trabaja de una manera muy sana. Hay jugadores grandes que marcan el camino, otros que no hablan mucho pero que con su comportamiento dicen un montón de cosas. Hay un grupo muy sano, tengo jugadores de una calidad humana notable y eso para mí facilita las cosas porque hace que nos enfoquemos en lo importante», resaltó.
Por último, respondió sobre la frase que popularizó luego del triunfo ante Boca en Mendoza: «¿Todavía no lo descifraron? Nada, fue algo sarcástico, algo irónico, que se me pasó por la cabeza en ese momento. Veníamos con mucha carga durante todas estas semanas. Me pareció divertido», concluyó.
