(INCLUYE VIDEO) El enganche cordobés de 19 años viene siendo figura en la Reserva y recordó en diálogo con LA MÁQUINA todo lo que tuvo que pasar cuando llego a River con tan solo 9 años. «Uno siempre tiene que estar muy fuerte de la cabeza», afirmó Cristian Ferreira, quien ya firmó su primer contrato con el club y tiene una cláusula de 15 millones de euros.
Cristian Ferreira está pasando un gran momento. El juvenil de 19 años disfruta su presente en la Reserva de River (dos goles en los últimos dos partidos) y de su presencia en la preselección Sub 19 de Argentina que se prepara para los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, que se disputaran en Bolivia desde el 26 de mayo.
Luego del empate de la Reserva el último domingo ante Rosario Central por 1 a 1, Ferreira dialogó con LA MÁQUINA y manifestó: “Cuando a uno le va bien, la confianza es lo más importante para un jugador”. Además, agregó que “es un trabajo duro, pero uno tiene que estar siempre preparado para lo que viene”.
El enganche firmó hace un año su primer contrato con el club, el cual tiene una clausula de salida de 15 millones de euros. El cordobés de 1,74 metro y 67 kilos ya tuvo su debut en Primera el pasado octubre, cuando un River alternativo cayó goleado 4 a 0 con Talleres en su tierra natal. “Dejando de lado el resultado, fue algo hermoso; estaba toda mi familia viéndome, me sentía muy feliz”, confesó Ferreira.
A pesar de su buen presente, el juvenil no se olvida de su llegada a Buenos Aires: «Yo jugaba en el el club Las Palmas en Córdoba y llegué a River con 9 años. Al principio es una experiencia muy fea que no se la deseo a nadie, lloraba todos los días porque extrañaba y me quería volver», explicó Cristian, quien por suerte le encontró la solución enseguida: “Pensaba sólo en fútbol y se me pasaba, el apoyo de mi familia fue muy importante”, cerró.
