Ni Marcelo Gallardo ni Ariel Holan definieron los protagonistas que saldrán este miércoles al campo de juego del Libertadores de América para disputar el encuentro de ida por los cuartos de final de la Copa. En ambos, las dudas pasan por la conformación de la mitad de la cancha, los hombres de ataque y el esquema que utilizarán desde el inicio.
Marcelo Gallardo y Ariel Holan juegan al misterio. Uno prueba un equipo, el otro también. Uno cambia algunos apellidos, el otro también. Hasta el dibujo no está claro, ni en uno ni en el otro. Los entrenadores se mimetizan al punto que los ensayos tácticos de ambos equipos, esos que son a puertas cerradas y suelen utilizarse para confirmar las alineaciones, terminan sembrando más dudas que certezas. Al menos hasta aquí.
Si algún desprevenido quiere saber cómo formará River para visitar a Independiente, que se olvide. Si algún fanático del Rojo se metió por error en este sitio y quiere chequear los 11 de Holan, también. Ninguno de los dos mostrará sus cartas, al menos hasta que los planteles arriben al estadio Libertadores de América y comiencen a calzarse la ropa para empezar la entrada en calor. A esta altura, ni los propios futbolistas saben quiénes van desde el arranque y quiénes no.
En el juego de las semejanzas, tanto el Muñeco como Holan saben que el arquero, los cuatro de atrás y el tradicional «5» salen de memoria: Armani; Montiel, Maidana, Pinola, Casco; Ponzio por el lado de River; Campagna; Bustos, Franco, Figal, Silva; Domingo, por el lado de Independiente.
Las dudas, al menos hacia afuera, nacen del medio hacia arriba. Porque el entrenador millonario tiene cuatro apellidos para tres lugares: Exequiel Palacios, Gonzalo Martínez, Juan Fernando Quintero e Ignacio Fernández. Con el «Tucu» adentro (se descarta que será titular), resta resolver si quedarán afuera Nacho, Juanfer o el Pity, o si resignará la presencia de Rafael Borré para que jueguen todos en el medio.
Con Ariel Holan sucede algo similar: Francisco Silva podría ser una rueda de auxilio para Nico Domingo en la mitad, pero no llegaría en su mejor forma desde lo físico. Lo mismo sucedería con Martín Benítez, que aparece como duda. Por este motivo, podría modificar el esquema y jugar con una o dos puntas, dependiendo de la presencia de los mencionados más arriba. Si no llega Silva ingresaría Pablo Hernández, si no lo hace Benítez podría aparecer Gigliotti desde el arranque.
¿Habrá alguna sorpresa de último momento en la disposición de ambos elencos? Conociendo los antecedentes de Holan y Gallardo, cualquier cosa podría suceder.
