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RIVER Y CRUZEIRO NO SE SACARON VENTAJAS EN LA IDA (IMAGEN: Prensa River)

River tuvo el control de la pelota y la victoria en los pies de Matías Suárez, pero no pudo romper el cero y empató sin goles frente a Cruzeiro por los octavos de final de la Copa Libertadores. Como en 2015, la serie quedó abierta y deberá definirse en Brasil. 

River comenzó el partido como nos tiene acostumbrados: apretando y ahogando a su rival, sin dejarlo respirar y jugando con el error por la misma presión ejercida. En los primeros 25 minutos tuvo el control del balón y del trámite, pese a que la primera jugada fue para los de Belo Horizonte: un desborde por la zona de Angileri-Pinola, que terminó en nada para la suerte de ambos defensores.

El millonario contó con pocas chances claras. Tuvo la pelota pero como pasó por Copa Argentina, no fue profundo y le costó mucho en los últimos metros. Ni Fernández, ni De la Cruz estuvieron finos en los pases, en tanto que Álvarez y Suárez pivotearon demasiado, perdiendo la referencia de área.

Las tres chances que tuvo River fueron un cabezazo de Suárez que Nacho desperdició en el rebote, un tiro libre de Fernández que Fabio controló con los puños y una que Nico De La Cruz que se llevó por delante y exigió al #1 brasilero.

El complemento River fue más de lo mismo: movió la pelota para los costados pero no llegaba con claridad al arco contrario. Su rival, en tanto, jugaba decididamente de contra y de hecho logró la ventaja, pero el juez Bascuñán anuló el gol a instancias del VAR. De ahí, en más el partido fue control de pelota de River y salida rápida de Cruzeiro, que llegaba a cercanías del área, pero se diluía en metros finales.

A falta de seis minutos para el cierre y luego de un córner, Lucas Pratto perdió el gol de la victoria con un cabezazo de frente al arco, cuando el arquero ya estaba vencido. Un minuto después el guardametas brasileño contuvo un cabezazo de Suárez, que en el rebote pareció dar en la mano de Dedé. Mientras todo River reclamaba penal, en la contra casi llega al gol Cruzeiro, pero Egidio desperdició una situación inmejorable definiendo por encima del travesaño.

Cuando todo estaba prácticamente definido, otra vez el VAR volvió a darle un penal a River. Matías Suárez quiso asegurarlo fuerte, al punto que impactó muy abajo el balón y el remate se perdió muy por encima del travesaño.

Así, la serie quedó abierta para definir en Brasil, como sucedió en las últimas dos copas ganadas por el millonario. ¡A seguir creyendo que River puede!