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FESTEJA DE LA CRUZ, OTRA VEZ A SEMIFINALES (IMAGEN: Prensa River)

River igualó 1 a 1 ante Cerro Porteño y logró sellar la clasificación en La Nueva Olla de Asunción. Nelson Haedo Valdez puso en ventaja al local, Nicolás De La Cruz marcó el empate para el Más Grande. El vigente campeón de América logró acceder a su tercera semifinal consecutiva en la CONMEBOL LIBERTADORES.

El vigente campeón de América volvió a dar una muestra carácter. En un partido chivo, una parada muy brava, el elenco de Marcelo Gallardo sacó a relucir la chapa de equipo copero y se llevó el empate que le permitió clasificar a la semifinal de la CONMEBOL LIBERTADORES por tercer año consecutivo.

En la primera etapa River la pasó muy mal. No tanto por el dominio o la presión que ejerciera el equipo local, sino fundamentalmente por que le dolían algunos bochazos largos a las espaldas de sus centrales. A los 7 minutos, Nelson Haedo Valdez anticipó a Robert Rojas -de muy flojo partido- y marcó el 1 a 0 tempranero que le permitió a Cerro Porteño soñar en grande.

River estaba largo, impreciso, abusaba de los pelotazos y perdió casi todas las divididas. Es cierto que el VAR omitió un roja muy clara para Haedo Valdez por una dura entrada contra Exequiel Palacios y un penalazo contra Ignacio Fernández cuando ingresaba al área para encarara a Juan Pablo Carrizo. Aún así, el millonario padeció por momento el juego aéreo del conjunto guaraní y de no mediar por una gran tapada de Franco Armani, pudo irse al descanso con una desventaja mayor.

En el complemento, el Más Grande ajustó algunas piezas y logró cierta precisión que no tuvo en el inicio del partido. A los 7 minutos, Matías Suárez desperdició un mano a mano con JP Carrizo, pero en el rebote entró De La Cruz y la colgó de un ángulo. Golazo y revancha para el uruguayo, que vivió una previa complicada.

De ahí en más, el desarrollo dio un giro rotundo. Cerro Porteño no volvió a meterse en partido, mientras que River manejó el juego a su antojo. Por momentos aceleró, en otros reguló. Pudo anotar algún otro gol, pero lo más importante de todo es que no volvió a sufrir. Y se abrazó a la merecida clasificación a puro carácter.

Así, River se metió en semifinales de la Copa y volverá a verse las caras ante el eterno rival. El millonario va por más historia. ¡Que la gente crea!