Isotipo_Figuras3
EL ABRAZO ENTRE DIEGO MARADONA Y MARCELO GALLARDO EN LA PREVIA DEL ENCUENTRO.

El River alternativo venció a domicilio al equipo de Diego Maradona por 2 a 0 con goles de Jorge Carrascal y Nacho Scocco y volvió a sumar de a tres en el campeonato. Ahora sólo piensa en Boca. La foto del día fue el abrazo de Gallardo y Maradona.

En el Día Internacional del Hincha de River, el millonario se recuperó de la derrota ante Vélez del pasado fin de semana y derrotó por dos goles a Gimnasia en La Plata, con Beto Bologna como gran figura.

Los primeros 45 minutos mostraron al equipo de Gallardo un tanto impreciso y parado muy atrás en el campo. Le dejó manejar la pelota a los dirigidos por Diego Maradona y se replegó para salir rápido de contra.

No se vio la mejor versión de River, que contaba con un equipo totalmente alternativo, y sufría mucho los centros que Gimnasia enviaba al área. De hecho, las más peligrosas de los locales venían mediante esa vía. Cada bocha al corazón del área era ganada por un jugador tripero, pero que se encontraba con la figura del arquero riverplatense, que volvía al arco del Más Grande luego de casi dos años.

La primera parte era chata, El millonario volcaba su juego por el sector de Fabrizio Angileri, que se proyectó varias veces por el andarivel izquierdo pero no finalizó sus centros de forma correcta.

Corrían 22 minutos del encuentro cuando Nacho Scocco recibió un pelotazo de más de cuarenta metros en el vértice del área, y con dos toques y un giro puso cara a cara a Jorge Carrascal con Alexis Martín Arias. El colombiano cruzó su remate y le dio la ventaja al millonario. La diferencia sólo era de categoría. River hacia en dos o tres toques lo que al conjunto de La Plata le costaba muchísimo.

La visita sólo mantenía el cero porque Enrique Bologna así lo quería, en tanto los de Núñez mostraban un equipo muy largo y que no tenía generación de juego.

El complemento fue muy parecido a esa primera parte, El equipo del Muñeco replegaba sus líneas y esperaba a un Gimnasia apurado por su gente, poco preciso, que tenía la pelota en tres cuartos de campo, parado la mayor parte del tiempo en campo de River, pero no estaba lúcido.

El Más Grande hacía pasar los minutos y el tripero se desesperaba. A los 28′, Nacho Scocco, como buen goleador, encontró una pelota que le cayó «de rebote» y definió fuerte ante la salida del 1 del Lobo. River liquidaba el partido por calidad y contundencia. El ex-Newell’s cortaba así seis partidos sin que los delanteros del Millo pudieran convertir.

Gimnasia iba con más ganas que fútbol, a por lo menos buscar el descuento, pero el arquero millonario estaba intratable y tapaba hasta las que no iban al arco. De contra los dirigidos por Napoleón pudieron ampliar la ventaja en los pies de Rollheiser o Carrascal, pero no estuvieron finos en sus definiciones.

Así, River volvió a sumar de a tres, casi sin merecerlo, pero tuvo contundencia e impuso la calidad de sus jugadores. El elenco de Napoleón se llevó una victoria importante del Bosque y hundió al conjunto de Maradona, que todavía no ganó desde que está en el banco. Hoy sólo se llevó el abrazo de Gallardo.