Tiago Geralnik, una de las joyas de las divisiones juveniles del Más Grande, se desvinculó de River a través de la patria potestad porque su familia vivirá en España. El mediapunta de la Sexta División jugará en el Villarreal. ¿Qué hará el club el club de Núñez para defender sus derechos? En esta nota, todos los entretelones del caso.
En diciembre de 2019 se despidió de sus compañeros, cuerpo técnico y colaboradores del proyecto infanto-juvenil con la sensación que iba a ser la última vez. Pese a que la Séptima División no tuvo su mejor año desde el punto de vista de los resultados, Tiago Geralnik fue uno de los goleadores de la categoría 2003. Su talento lo llevó a las convocatorias en selecciones juveniles y a que el propio Marcelo Gallardo posara los ojos en él. Por eso, sugirió que formara parte de la Reserva en el último partido del año -estuvo en el banco de suplentes en el triunfo ante San Lorenzo en River Camp- y la dirigencia comenzó las conversaciones para realizarse su primer contrato profesional, como sucedió con varios chicos que alcanzaron los dieciséis años de edad.
Más allá de los intentos de River para a seducir a Tiago, la decisión familiar ya estaba tomada: ir a vivir al viejo continente. Allí se encuentra su padre Marcelo, que es preparador físico y está vinculado al fútbol con una academia de captación y formación de juveniles. Su destino será Villarreal de España, el mismo club que hace unos años atrás se llevó también a Francisco Bonfiglio, una de las joyas de las inferiores de San Lorenzo.
¿Qué puede hacer River para defender su postura? Desde el punto de vista legal, puede iniciar una demanda contra el club, en esta caso Villarreal, ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS). Sin embargo, los antecedentes no ayudan demasiado, como sucedió recientemente con Benjamín Garré, que se fue de Vélez al Manchester City y hoy futbolista de Racing. La otra posibilidad es iniciar una negociación de club a club para recibir algún dinero en concepto de compensación o conservar un porcentaje de los derechos económicos. Es lo que intentará el millonario en este caso y lo que podría aceptar Villarreal para evitar la vía jurídica y posibles sanciones a futuro.
En medio del tire y afloje aparece el nombre de Fabián Soldini, su agente. Es el mismo que gestionó la salida de un tal Lionel Messi cuando jugaba en las infantiles de Newell’s Old Boys y consiguió su arribo al Barcelona de España. Hoy es el director de una escuela de fútbol, la Agrupación Deportiva Infantil Unión Rosario (ADIUR), que tiene convenio desde el 2008 con…¡Villarreal de España! ¡Bingo!
Los dirigentes entienden que Soldini utilizó a River como vidriera porque hace dos años su familia no podía instalarse en España. Cuando pudieron, pegaron el zarpazo. Para colmo, Soldini es representante de Ignacio Scocco, que está negociando por estos días la extensión de su contrato con River. ¿Qué determinación tomarán Rodolfo D’Onofrio y compañía?
