(INCLUYE VIDEO) Un día como hoy, hace dieciocho años, el River de Ramón ganaba, gustaba y goleaba a Boca Jrs. a domicilio por el Torneo Clausura 2002. El Día de la Vaselina. Un superclásico inolvidable.
Fue una tarde lluviosa, pero para el hincha de River salió el sol. Es que el equipo de Ramón llegaba ese día a la Bombonera con la ilusión de volver a ganar después de siete años y nueve meses sin victorias en terreno rival. Además, llegaba entonado a esa fecha 6 del Torneo Clausura 2002, luego de cuatro triunfos y un empate. Fue hace dieciocho años, pero ese día será eterno.
«A Boca lo vamos a atacar como locos», había declarado Eduardo Coudet en la semana previa. Y el Millonario salió con esa premisa a jugar en la Bombonera. Con una línea de tres en el fondo (Garcé, Celso Ayala, Rojas), con un doble cinco de mucho juego (Ledesma, Cambiasso), con dos carrileros que hacían toda la banda (Chacho y Zapata) y con un tridente poderoso en el ataque (D’Alessandro de enlace, Ortega y Cavenaghi adelante). Bajo los tres palos estaba el histórico Ángel David Comizzo, que ese día jugó un partido especial.
El primer grito llegó a los 26 minutos de juego. Ariel Ortega tiró un centro llovido que cayó en los pies de Esteban Cambiasso. El Cuchu metió un puntinazo con la pierna menos hábil y batió la resistencia del Pato Abbondanzieri.
El 2 a 0 nació de una «avivada» del Burrito, que robó el balón ante Chicho Serna y comandó el contragolpe: toqueteo entre Zapata, Ortega, Cavenaghi y Coudet, que sacó un remate cruzado y la puso contra el palo derecho a los 41 minutos del primer tiempo.
En el complemento, River no lo mató de contra y Boca se le vino encima. Allí apareció la figura de Trapito Comizzo para sostener la ventaja. Claro que faltaba la frutilla del postre: a dos del pitazo final, Ricardo Rojas agarró la lanza, tocó con D’Alessandro, éste con Ortega y apareció otra vez el misionero para meter un amague y picarla por encima de Abbondanzieri. Una «vaselina» inoxidable para hacer delirar las dos bandejas visitantes de la Bombonera y pronunciar la salida anticipada del público local.
River formó aquella tarde histórica con Ángel David Comizzo; Ariel Garcé, Celso Ayala, Ricardo Rojas; Eduardo Coudet, Cristian Ledesma, Esteban Cambiasso, Víctor Zapata, Andrés D’Alessandro; Ariel Ortega y Fernando Cavenaghi. En el segundo tiempo ingresaron Martín Demichelis por Víctor Zapata, Guillermo Pereyra por Esteban Cambiasso y Claudio Husaín por Eduardo Coudet.
