(INCLUYE VIDEO) En diálogo con LA MÁQUINA RADIO vía Instagram Live, Esteban Fernández contó cómo atraviesa estos días de cuarentena con los entrenamientos a distancia y el plan nutricional que les envía el club. Además, hizo un balance de sus primeros meses en la Reserva, reveló qué sintió cuando le tocó hacer trabajos con la Primera y qué le piden los entrenadores para mejorar su jugar.
Nuestro ciclo de entrevistas vía Instagram Live tuvo como protagonista a Esteban Fernández, una de las jóvenes promesas que tiene el semillero millonario. Antes de la pandemia tuvo la chance de debutar en Reserva y hasta anotar su primer tanto con la categoría. A pesar del parate obligatorio por el coronavirus, se sigue preparando para cumplir el gran sueño de llegar a la Primera División.
En diálogo con LA MÁQUINA RADIO, el enganche de la Reserva contó cómo vivió todos estos días de confinamiento y trabajos a distancia, lejos de los campos de juego: «Fue todo de un día para el otro. Terminamos de entrenar un viernes y ya el lunes no fuimos. Nos mandaron por mensaje que no íbamos a entrena más. Igual River está atento a todo. Hasta la nutricionista nos manda todo», indicó el futbolista oriundo de Pablo Podestá.
En cuanto a las prácticas por videollamado, explicó en qué consisten: «Nos están dejando un plan de entrenamientos. Ahora de lunes a jueves nos conectamos todos a zoom y entrenamos todos juntos. No es lo mejor, pero no queda otra. A mi me gusta entrenar con la pelota. Acá tengo un espacio pero chiquito. Es difícil, pero trato de hacer lo que me mandan», comentó.
El 2020 comenzó con una gran noticia para Esteban: Juanjo Borrelli y Gustavo Fermani, los nuevos entrenadores de la Reserva, lo convocaron para hacer su primer pretemporada con la división. Y no sólo eso: tuvo la chance de subir junto a Tomás Lecanda y Santiago Simón, dos viejos conocidos de la categoría 2002: «Es algo muy lindo, más con compañeros. No lo podés creer porque venís jugando desde tan chiquitos con ellos que ya que subas a Reserva saltando dos categorías es algo que no lo podés creer. Es lo más lindo que tiene el fútbol, jugar con tus amigos desde los nueve años, jugar con ellos todos los sábados, ir y abrazarlos cuando hacen un gol, o simplemente hacer una pared o jugar es lo más lindo que te puede pasar», afirmó.
Por su parte, reveló que antes del COVID-19 tuvo la chance de compartir varias prácticas con el plantel profesional: «Tuvimos varios entrenamientos con ellos. Está muy bueno, pero no agarrás la pelota (risas). Ya con estar ahí y tocarla dos o tres veces…es algo hermoso. No lo podés creer, pero tenés que agarrar la pelota y demostrar. Si la tenés te presionan de tres y no sabés qué hacer», admitió. Además, contó que pudo entablar algunas conversaciones con algunos jugadores: «Hablé con Juanfer y Zuculini. Todos son re buena onda», remarcó.
Consultado por el compromiso de Marcelo Gallardo y su cuerpo técnico en el proyecto infanto-juvenil, expresó: «Está muy bueno porque sabés que te miran todo el tiempo. Estás entrenando y te miran, jugás y te miran», manifestó.
¿Qué es lo que sentís que todavía te tenés que seguir puliendo? «Por ahí me falta un poco más el físico y pegarle más desde afuera al arco. La verdad que no le pego mucho», reconoció el juvenil. ¿Y lo mejor de tu juego? «En el mano a mano me va bien, eso sí. Me gusta jugar rápido, Uno sabe que si tenés el cuerpo chiquito te chocan y te tiran, así que tenés que jugar a uno o dos toques, o tenés que tocar y pasar. La diferencia entre Sexta y Reserva se nota mucho, te cuesta, pero una vez que agarrás el ritmo, volás», agregó.
Por su parte, resaltó que le pide Jota Jota Borrelli para potenciar su nivel: «Juanjo siempre me da consejos, me dice que cuando esté en tres cuartos de cancha encare para adelante, pero cuando esté más abajo toque de primera», aseguró.
Para finalizar, adelantó cómo espera que sea su debut: «Te lo imaginás, pero no sabés lo que va a pasar. Puede ser entrando del banco y jugando un ratito, viendo a mi familia contenta en la tribuna. ¿Si hago un gol? Me largo a llorar ahí en la mitad de la cancha», concluyó.
