River ganó, gustó y se llevó una goleada histórica ante Nacional en Montevideo. Jorge Carrascal, Nicolás De La Cruz, Bruno Zuculini y Rafael Borré por triplicado anotaron los goles del Millonario para el triunfo por 6-2 en el Parque Central. ¡A semifinales por cuarto año consecutivo!
El 2-0 logrado en la ida parecía una ventaja indescontable para Nacional. Sin embargo, el equipo de Marcelo Gallardo se tomó muy en serio la revancha ante el Bolso y salió a jugar como si la serie estuviera 0-0. ¿El resultado? Un partidazo del club de Núñez, que aplastó al elenco oriental y lo goleó 6 a 2 en su propio campo.
En la primera etapa, River salió a buscar el partido desde el vamos y de igual a igual, a pesar de la ventaja conseguida en la ida. Tuvo el primer aviso a los cuatro minutos, cuando Carrascal recibió un centro preciso de Montiel y definió de primera, sin demasiada potencia.
A los 17 minutos, el arquero local salió a cortar lejos de su valla, erró a la patada y cruzó a Matías Suárez con un planchazo descalificador que lo mandó directamente al vestuario. Roja para el joven Rochet. Con uno más, River se adueñó del trámite, de la pelota y de las acciones de peligro.
La primera emoción llegó a los 27 minutos, con una buena contra del Millonario que terminó en los pies de Carrascal. El colombiano definió ante la salida de Mejía con un remate excelso, que se clavó contra el palo superior izquierdo del arquero panameño.
River siguió insistiendo y tuvo su premio a los 45 minutos. Otra buena jugada colectiva del elenco del Muñeco, que movió la pelota y encontró a Nico De La Cruz en posición de remate. El uruguayo probó desde afuera y la colgó en el mismo ángulo que Carrascal. Otro golazo para el Más Grande, que no se fue con una diferencia de dos tantos porque se durmió en la última pelota y permitió que Ayrton Cougo descontara en tiempo de descuento.
En el complemento, los de Núñez volvieron a sacudir de entrada. A los 4 minutos, el que apareció por el corazón del área fue Bruno Zuculini, como en la ida, esta vez para barrer desde el piso y establecer el 3-1. El goleador impensado. En la jugada siguiente, River volvió a dar una ventaja defensiva y apareció Santiago Rodríguez para definir cruzado, ante la salida de Franco Armani.
Con el partido 3-2, Nacional estuvo a tiro del empate pero el poste derecho de Armani y la reacción posterior del #1 evitaron la caída de su arco. Pese a la reacción del local, los dirigidos por Napoleón siguieron buscando y generando situaciones netas de gol. Nico De La Cruz casi la clava de tiro libre. En la jugada siguiente, apareció Gonzalo Montiel y tiró el centro atrás para que empuje Rafael Borré y corte su sequía goleadora. Esa misma fórmula se volvió a repetir en dos oportunidades más y el propio colombiano definió debajo del arco. Hat-trick para para recuperar la confianza y llevarse la pelota a casa.
El partido terminó siendo baile. River tuvo una actuación superlativa, se llevó una goleada histórica de Montevideo y se metió por cuarto año consecutivo en las semifinales de la Copa Libertadores. Ahora toca Palmeiras. ¡Arriba River nomá!
