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A RIVER NO LE SALIÓ NADA Y SUFRIÓ UN DURO REVÉS (IMAGEN: Getty Images)

River tuvo una noche para el olvido: cometió tres errores que pagó sacando del medio y cayó 3 a 0 ante Palmeiras. Carrascal dejó al equipo con diez por una irresponsabilidad. Ahora depende de una hazaña en Brasil para meterse en la final de la CONMEBOL Libertadores.

A River no le salió nada. Nada de nada. Y eso que tuvo un buen comienzo, con el funcionamiento habitual, imponiendo las condiciones en el partido y generando situaciones claras de gol. En el arranque lo tuvo Rafael Borré. Más tarde perdió un gol increíble Borré. Parecía que se lo iba a llevar por delante al Palmeiras. Sin embargo, pasaron cosas.

A los 26′, Franco Armani cometió un error increíble: intentó despejar con los pies y se la dejó servida a Rony, que remató cruzado y contó con la complicidad de un rebote en De La Cruz que desacomodó al arquero. Casi sin proponérselo, Palmeiras se puso 1-0. Toda de River.

En el complemento, el Millonario volvió a sufrir un duro revés. Robert Rojas volvió a cometer un error insólito, soltó a Luis Adriano y el goleador de Palmeiras se escapó solo para definir ante la salida de Franco Armani. Un gol psicológico que mató el partido para River.

A los 14 minutos, Jorge Carrascal se hace expulsar insólitamente. De ese tiro libre llegó el centro de Gustavo Scarpa y el cabezazo de Matías Viña que se clavó contra el segundo palo.

River fue más con vergüenza deportiva que con ideas. Y en esa búsqueda del descuento, estuvo más cerca de sufrir una goleada histórica que achicar la brecha en el resultado. En definitiva, el 3-0 de la visita terminó quedando corto por lo hecho en los segundos cuarenta y cinco minutos.

Una diferencia que parece irremontable, aunque al River de Gallardo no hay que darle nunca por muerto.