River cayó 2 a 0 ante Independiente en el Florencio Sola y se quedó sin final en la Copa Diego Maradona. Alan Velasco anotó los dos tantos para la visita. El Millonario sumó su segunda derrota consecutiva y apuesta a todo o nada por un milagro en la Libertadores.
River atravesó la peor semana en mucho tiempo. Luego del duro revés que sufrió el último martes ante Palmeiras, los dirigidos por Marcelo Gallardo repitieron errores y una falta de reacción que volvió a pagar muy caro. Esta vez ante Independiente, por la Copa Diego Maradona, donde tenía chances concretas de llegar a la final.
En la primera etapa se vio lo peor del equipo del Muñeco. Sobre todo en la faceta defensiva, donde volvió a padecer ante la pérdida y las transiciones rápidas del Rojo. Ya de entrada nomás tuvo una situación muy clara en los pies de Alan Velasco, que quedó mano a mano con Franco Armani pero el uno del Millo alcanzó a desviar con la punta de sus dedos.
River fue más con empuje que con ideas. Y si bien generaba algunas subidas interesantes por el sector de Angileri, los intentos terminaban mal, siempre en los pies de los defensores rivales. Para colmo, antes del cierre de la primera etapa Alan Velasco volvió a probar desde media distancia. Esta vez, contó con la complicidad de Franco Armani, que se tiró antes, se comió el pique de la pelota y terminó participando de otro blooper.
En el complemento, River mejoró desde el funcionamiento y mostró una mejor cara. Contó con muchas situaciones para llegar al descuento y lo mereció largamente. De entrada nomás, Fabricio Bustos salvó sobre la línea un remate de Borré. Más tarde, el colombiano casi convierte de cabeza. Y tras cartón, Nacho Fernández pegó un zurdazo en el palo. A esta altura, el Millonario estaba en otra de esas noches que no ligaba nada.
Sobre el final, hubo un manotazo de Alexander Barboza sobre Matías Suárez que pudo terminar en roja y penal para River. Diego Abal no lo vio, el lineman tampoco. Esto desató el enojo de Marcelo Gallardo, que le dijo «payaso» al juez de línea y se fue expulsado. Todo un símbolo de impotencia.
De esta manera, el equipo del Muñeco volvió a fallar en la definición, reiteró errores en la última línea y se quedó sin final en la Copa Diego Maradona. Ahora, sólo queda un milagro el martes ante Palmeiras.
