River, con un hombre más, no pudo sostener la victoria y lo perdió en la última bocha del encuentro: cayó 2 a 1 en La Plata y comenzó con un traspié en la Copa de la Liga. Matías Suárez puso en ventaja al Millonario. Mauro Díaz y Fabián Noguera le dieron el triunfo al equipo de Ricardo Zielinski, que jugó todo el segundo tiempo con diez por la expulsión de Fernando Tobio.
Era un partido a pedir de River. Por el desarrollo, por la expulsión de Tobio antes de ir al descanso, por el funcionamiento que mostraba el equipo de Marcelo Gallardo en ofensiva. Sin embargo, el Millonario volvió a sufrir desatenciones en la última línea y pagó muy caros los errores.
En la primera etapa, el elenco del Muñeco se hizo dueño del balón y tuvo un inicio auspicioso. Movía bien la pelota de una lado a otro y encontraba espacios para lastimar al rival. Pero con el correr de los minutos, Estudiantes emparejó las acciones y hasta contó con algunas chances claras de gol. Julián Álvarez salvó sobre la línea y Franco Armani tapó un mano a mano que podrían haber cambiado el marcador en favor del local. La buena para el Más Grande es que Fernando Tobio metió un planchazo descalificador sobre Rafael Borré y se fue al vestuario antes del descanso.
En el complemento, a River le costó el arranque. Con un hombre más, salió a jugar con Benjamín Rollheiser en lugar de Robert Rojas y un 4-3-3 más ofensivo. Sin embargo, no encontraba el último pase. Hasta que Marcelo Gallardo realizó un cambio posicional: Matías Suárez pasó a la derecha y Julián Álvarez a la izquierda. A partir de ese enroque, la Araña metió un pase divino para el pique de Fabrizio Angileri, que mandó el centro atrás y encontró a Matías Suárez por el segundo palo para establecer el 1-0.
Con el 1-0, el partido estaba a pedir de River, que ahora contaba con más espacios y un rival que no tenía demasiados argumentos para lastimar. Pero a los 32 minutos, Estudiantes se encontró con una pelota parada y una de las pocas chances que tuvo para igualar la historia. Leandro Díaz la aguantó, jugó con Mauro Díaz y el enganche cumplió con la «Ley del Ex»: amagó, desarticuló a Javier Pinola y definió con un derechazo cruzado, inatajable para Franco Armani.
El encuentro tuvo un desenlace insólito. Fabián Noguera interpuso sus dos manos ante un remate de Paulo Díaz. Era un claro penal, pero Facundo Tello decidió no sancionarlo. Ya en tiempo de descuento, el Pincha volvió a sacar agua de las piedras y llegó llegó al segundo grito a través de un tiro libre que conectó el propio Noguera, esta vez con la cabeza. Y si le faltaba algo al epílogo, Mariano Andújar manoteó el último cabezazo de Federico Girotti, que tenía destino de gol. «Ni el tiro del final te va a salir», diría un viejo tango.
River se quedó así con las manos vacías en el debut de la Copa de la Liga. Mereció el triunfo, pero volvió a fallar en las áreas y el equipo de Zielinski no tuvo piedad.
