Con un pie y medio en las próximas instancias de Copa Libertadores y Copa de la Liga, Marcelo Gallardo destacó la voracidad del plantel para disputar el compromiso con prestancia y además valoró el reencuentro de Julián Álvarez con el gol.
El miércoles en Chile, River logró sacar adelante un compromiso muy chivo ante Colo Colo para encaminar la clasificación a Octavos de final de la Copa Libertadores, pero la obligación se trasladó al plano local porque un mal resultado en Junín implicaba llegar a al última fecha con posibilidades de quedar completamente afuera de la pelea. Sin embargo, el 7-0 lapidario despejó la mala suerte y encima otorgó tranquilidad para el entrenador, que analizó la victoria en conferencia de prensa: «Venimos de dos partidos importantes porque eran partidos decisivos y lo hicimos muy bien, bien por el equipo. Enfrentamos a un equipo con mucho entusiasmo, que venía prendido en la pelea por la clasificación y pudimos conectar. Se nos iba a hacer difícil si no lo sabíamos entender al partido, yo creo que el equipo goleó porque jugó un gran fútbol y eso termina siendo un resultado abultado, el equipo jugó para eso, lo jugamos con muchísima seriedad y por eso el resultado con mucha diferencia».
Más allá de que Sarmiento comenzó con los dientes apretados e incluso merodeó el área de Franco Armani, la diferencia de jerarquía fue notable. Pero para Marcelo Gallardo no se trató de un trámite, dado que en caso de no haberlo liquidado con rapidez, el dueño de casa podría haber hecho tambalear los tres puntos. «Estos son equipos peligrosos que con algo se podían meter en el partido si bajábamos la concentración. Con un centro peligroso, con un lateral al área, pero eso no sucedió por suerte porque jugamos con seriedad desde el principio hasta el final», opinó sobre la propuesta de Israel Damonte, ex compañero, ex dirigido y quien también lo puso en aprietos como estratega de Arsenal.
Consultado por el triplete de Julián Álvarez, que no inflaba la red desde el 16 de febrero en el 4-0 sobre Gimnasia de La Plata, el DT fue claro: además de ser un goleador, juega por y para el objetivo grupal. «Siempre es importante el jugador que mete el goles y el que da el pase. No había que entrar en exageraciones cuando no convertía porque es un jugador importante para el equipo. El problema no estaba con nosotros, el problema estaba afuera. Sabíamos que iba a encontrar el gol, sin desesperación, pero obviamente que nos da un plus porque sirve para su confianza», cerró.
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