Al igual que con Argentinos Juniors, tres de los suplentes que ingresaron contra Estudiantes convirtieron en la goleada 5 -0 y volvieron a hacer una marca histórica que se había logrado por primera vez la semana pasada.
River volvió a las bases: ganó, gustó y goleó. Quizás porque pudo abrir rápido el partido, o también fue por los grandes lapsos de buen juego que mostró el equipo. Lo importante es que se acomodó en la tabla general de la Copa Libertadores y volvió a jugar bien al igual como lo hizo frente a Argentinos Juniors la fecha pasada. Ocho goles en los últimos dos partidos, y sin embargo los protagonistas no fueron los titulares, sino los de afuera.
Por primera vez en la historia del Millonario, tres jugadores que entraron desde el banco de suplentes lograron convertir. Esto ocurrió el domingo, cuando en La Paternal, Juan Fernando Quintero, Agustín Palavecino y Lucas Beltrán lograron convertir un tanto cada uno y así romper esta marca histórica. ¿Lo curioso de esto? ¡Ayer volvió a ocurrir! Fue el turno de Pablo Solari, Esequiel Barco y Matías Suárez que en una ráfaga de cinco minutos aumentaron en tres ocasiones el marcador.
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