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Con los tantos de Facundo Colidio e Ignacio Fernández, River se impuso 2-0 ante Rosario Central y se quedó con el Trofeo de Campeones en Santiago del Estero. De esta manera, Enzo Pérez se despide del Millonario sumando una nueva conquista.

En el arranque del partido, River salió a comerse al rival e imponiendo sus condiciones. La primera chance clara fue la volea de Claudio Echeverri con desvío previo, que se terminó yendo muy cerca del palo derecho defendido por Jorge Broun. Minutos más tarde, El Más Grande seguía insistiendo y sometiendo en un arco al conjunto rosarino. Nicolás De La Cruz reventó el travesaño tras su remate ferviente y segundos más tarde llegó una situación clarísima de Pablo Solari,  quien estrelló su disparo en el palo izquierdo.

Cuando parecía que el primer tiempo culminaba sin emociones River tuvo su recompensa. Una jugada iniciada desde la mitad de la cancha por Esequiel Barco y un distinguido centro pasado de Solari desde la derecha bastaron para que Colidio la empujara y desatara la locura de la hinchada Millonaria tras abrir el marcador por 1-0.

El segundo tiempo arrancó con un River que disminuyó su volumen de juego, pero controlando el partido y la posesión. Sin embargo, el elenco de Arroyito tuvo una chance clara para igualar el encuentro, tras un remate cruzado de Ignacio Malcorra que descolocó en el camino a Franco Armani y que Martínez Dupuy no llegó a conectar.

Las cosas se le iban a terminar complicando aún más a los dirigidos por Miguel Russo, porque se iba a terminar quedando con 10 jugadores luego de que Jaminton Campaz vería la tarjeta roja por doble amarilla. Demichelis movió el banco e ingresaron Miguel Ángel Borja y Nacho Fernández. El Millonario agarró otra vez el ritmo del partido y, en esos minutos de efervescencia, liquidó el partido con el gol de Ignacio Fernández tras una asistencia exquisita de Barco.

Todo era fiesta y euforia para los hinchas riverplatenses. Pero llegaron las horas de las emociones y ovaciones: Enzo Pérez dejó el terreno de juego casi con lágrimas en sus ojos para darle su lugar a otro histórico como Jonatan Maidana. Central llegaría al descuento, pero finalmente la jugada de pelota parada quedaría anulada por offside.

De esta manera, River cerró el año con una sonrisa y se quedó con el Trofeo de Campeones, logrando su segundo título en el año. ¡Felicidades, campeón!

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