Calos Carbonero y Giovanni Simeone debutaron oficialmente con la camiseta de River. Más allá del resultado, cumplieron y estuvieron cerca de convertir en el arco rival.
Simeone y Carbonero hicieron su presentación en sociedad con la camiseta millonaria. Con un resultado que seguramente no esperaban, es cierto. Pero con algunos matices, cumplieron y hasta estuvieron cerca de marcar su primer gol en Primera con la banda roja.
Carbonero fue uno de los mejores jugadores de River en un pálido primer tiempo. Las apariciones del colombiano por la derecha permitieron abrir a una defensa siempre bien parada y ordenada. Además de mostrar algunos destellos y asociaciones interesantes con Manuel Lanzini, el ex- Arsenal estuvo cerca de gritar su primer gol con la banda roja. En el inicio, con un tiro de mediana distancia que se fue besando el palo derecho de Monetti. En el complemento, por un remate incómodo que manoteó el arquero «tripero» a puro reflejo. En el balance, fue positiva la actuación del mediocampista cafetero.
Por su parte, el hijo mayor del «Cholo» Simeone tuvo que lidiar con la tarea más complicada: ser el eje de todos los ataques de River. Fue el único punta y le costó entrar en contacto con la pelota por la falta de abastecimiento. Sin embargo, mostró sacrificio, las peleó todas, y casi tuvo su recompensa a poco del final, cuando de cabeza casi marca su gol soñado. Una vez más, el arquero del «Lobo» se agigantó y logró manotear una pelota que se clavaba abajo, en el ángulo.
Otro que volvió a vestir la camiseta millonaria fue Osmar Ferreyra, que alternó buenas y malas, pero dio la permanente sensación de bloquear las proyecciones de Leonel Vangioni por la banda izquierda.
Mientras tanto, Teófilo Gutiérrez y Jonathan Fabbro observaron el partido desde la platea visitante, esperando que llegue el transfer y poder debutar. Y lógicamente, comenzar a escribir la historia con un resultado positivo.
Por Ubaldo Kunz / @Sepu79
