River Plate y Millonarios FC igualaron 2 a 2 en los 90 minutos, pero el conjunto bogotano acertó en los penales y se quedó con la «Copa Alfredo Di Stéfano». Los goles para el equipo de Gallardo los marcaron Lanzini y Urribarri.
En la fría noche bogotana, River entró dormido y comenzó perdiendo casi desde el vestuario. El reloj no había marcado el minuto de juego y el local ya se había puesto en ventaja gracias a una definición cruzada de Jonathan Agudelo.
River manejó la pelota y dominó el resto del primer tiempo, pero el conjunto local fue peligroso de contragolpe y pudo aumentar el marcador en un par de oportunidades. Sin embargo, cuando la primera etapa se iba, Sebastián Driussi fabricó un «piletazo» dentro del área que el árbitro compró y Manu Lanzini canjeó por gol.
En el entretiempo, los técnicos decidieron meter manos en sus equipos y cambiaron por completo la naturaleza del partido. El «Muñeco» Gallardo cambió los once jugadores en cancha, mientras que Lillo introdujo diez modificaciones.
Cuando se cumplían 22 minutos, otro quedo defensivo de La Banda le permitió al local conseguir nuevamente la ventaja, esta vez en los pies de Anderson Plata. Pero tres minutos después, Bruno Urribarri envió un remate con olor a centro que se coló en el segundo palo del arquero azul y sentenció el empate definitivo.
Con la igualdad consumada, fueron a los penales. Ahí Millonarios fue más efectivo que River y logró imponerse por 4 a 3 (en el equipo argentino fallaron Andrada y Chiarini). Así, el trofeo homenaje a don Alfredo Di Stéfano quedó en Colombia.
