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FOTO: Ubaldo Kunz I La Máquina
FOTO: Ubaldo Kunz I La Máquina

(INCLUYE AUDIO) En diálogo con LA MÁQUINA RADIO, Federico Lavallén contó cómo vive la previa del superclásico y cómo gritaría un gol ante el rival de toda la vida.

La cabeza está puesta en el superclásico. Desde hace dos semanas ya. Es que las lluvias que cayeron el último fin de semana postergaron el partido más esperado del año, siete días más.

En diálogo con LA MÁQUINA RADIO, Federico Lavallén contó cómo vive los días previos al derby: «Es una semana distinta, anormal, donde se vive la euforia del clásico, que queremos ganar. No siempre se puede jugar bien, los clásicos se juegan de una manera distinta, pero hay que tratar de ganar porque es el partido clave del año», afirmó.

El delantero de la Sexta División millonaria destacó también el estilo de juego de su equipo, que en las últimas horas se quedó sin uno de sus entrenadores, Alejandro Montenegro: «Estamos desplegando un muy buen fútbol, con una formación muy linda que es 4-3-3, un juego muy ofensivo cuando hay que atacar, cuando defendemos bajamos todos…si buen puede haber errores, el grupo está muy unido y eso va a hacer que se hagan las cosas más fáciles», reconoció.

Además, trazó un paralelismo entre la forma de jugar de la Sexta y el estilo que impuso Gallardo en la Primera: «Siempre fui un jugador que bajo, que me gusta ayudar a mis compañeros a defender. El técnico me pide también que baje. Lo hago por el bien del equipo, porque la pelota es con lo que se juega, lo que queremos tener y hay que recuperar rápido para poder desplegar el fútbol que queremos, como hace la Primera ahora», señaló.

Por su parte, remarcó la importancia que tienen los consejos de su padre, Pablo Lavallén: «Tengo la suerte de tener a mi viejo que fue un jugador profesional, que me ayuda todos los días, que me dice los errores, lo que hay que hacer. Aparte él fue defensor y yo delantero, y me da los tips para encarar un defensor, lo que más le molesta…creo que soy un afortunado y saco bastante ventaja de eso».

Por último, reveló cómo celebrará si tiene la posibilidad de convertir este fin de semana ante el rival de toda la vida: «El festejo no se compara. Un gol contra Boca se grita, se corre, se deja la vida…Un festejo en un superclásico no es cualquier cosa, hay que gritarlo hasta que no te de más la garganta para demostrar lo que es ganar un clásico y más si sos hincha de River», cerró.

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