El Ministerio de Seguridad, en otra polémica decisión, decidió sancionar a River Plate con la clausura provisoria de la tribuna Centenario Media, por algunos incidentes e irregularidades que se produjeron durante el último superclásico. ¿Qué pasará con los socios que reservaron su localidad para el encuentro contra Unión? Una vez más, reina la desprolijidad.
Si pudiera confeccionarse un catálogo de decisiones ridículas en materia de seguridad deportiva, los castigos que recaen habitualmente contra el estadio Monumental ocuparían varias carillas. Nuevamente, el recinto más seguro y confortable del país vuelve a sufrir otra medida inentendible e injusta.
Para el Ministerio de Seguridad, los hechos de mayor gravedad ocurridos durante el último clásico en Nuñez tuvieron que ver con algunos piedrazos que cayeron desde la Centenario Media hacia la parcialidad visitante, y unos tubos de helio que fueron localizados en uno de los depósitos de esa tribuna que habrían sido utilizados para darle forma al inofensivo «Chacho Riquelme» que se infló durante el entretiempo.
Estos motivos llevaron a determinar una clausura provisoria de la tribuna Centenario Media, mientras que el resto de la cabecera estará habilitada con normalidad. Una ridiculez por donde se la mire, teniendo en cuenta los hechos de gravedad que ocurren todos los domingos cada vez que el Millonario juega de visitante. Parece que no todos los estadios son medidos con la misma vara.
Por lo pronto, las autoridades deberán decidir que se hará con los 3.500 hinchas de River que reservaron su entrada para esta localidad, teniendo en cuenta que las entradas están agotadas y tendrían que ser redistribuidos en otros sectores del estadio. Una vez más, triunfa la idiotez de quienes en materia de seguridad fracasan permanentemente.
