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FOTO: Olé
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En un duelo durísimo, Lanús y River Plate igualaron 1 a 1  en el sur. Lautaro Acosta adelantó en el marcador al local, mientras que Teo Gutiérrez empardó el marcador a 20 minutos del final. El conjunto de Gallardo mantuvo el invicto y llegará como único puntero al superclásico.

Lanús y River se sacaron chispas en el sur. Por lo que estaba en juego. Por la personalidad de ambos equipos. Por la ambición de buscar el arco contrario a lo largo de los 90 minutos, de uno y otro lado.

En el primer tiempo, el «Millonario» fue un claro dominador del juego. Si bien le faltó profundidad en los último metros, se hizo dueño de la pelota desde el minuto cero y tuvo las mejores situaciones. La más clara se dio a los 32′, cuando Rodrigo Mora reventó el travesaño de Marchesín.

Sin embargo, el «Granate» golpeó primero. Aprocechó una mala salida de la defensa visitante y Lautaro Acosta, habilitado por un pase exquisito de Silvio Romero, definió contra el palo izquierdo de Barovero para desatar la primera emoción de la noche.

River sintió el impacto y le costó asimilar el tanto local. Con poco volumen de juego, La Banda recién pudo aproximarse al arco rival a través de la pelota parada. Fue a los 17 minutos del complemento, cuando Marchesín calculó mal la salida y esta vez Pisculichi estrelló el balón en el travesaño.

Más allá de esta llegada, Lanús parecía tener controlado el juego de River. Hasta que apareció el jugador distinto. A los 25 minutos del segundo tiempo, sacó un derechazo desde 25 metros del arco que se coló por debajo del cuerpo del «1» granate.

Con la igualdad abrochada, River salió en busca del segundo gol y estuvo cerca de conseguirlo. Primero, con un cabezazo del recién ingresado Germán Pezzella que pasó muy cerca del arco. Luego, Teo no pudo sacarle el jugo a un mano a mano con Marchesín en el que definió al cuerpo del arquero.

Los últimos minutos fueron dramáticos, de ida y vuelta, con dos equipos entregados al golpe por golpe. Ninguno de los dos pudo sacar del desgaste físico y los espacios que se generaron.

Así, con el empate consumado, River se fue conforme del sur porque sirvió para llegar invicto al superclásico y mantener la ventaja de cuatro unidades sobre Lanús.