Por Ubaldo Kunz
El equipo de Matías Almeyda, pese a superar en el trámite al conjunto santafesino, apenas pudo rescatar un empate frente a Atlético de Rafaela. Desperdició un sinfín de situaciones de gol. La peor noticia es la lesión de Germán Pezzella, que sufrió una rotura de ligamentos de su rodilla derecha.
River volvió a dejar puntos en el camino. Esta vez, fue en el estadio «Nuevo Monumental» de Rafaela, ante un equipo que se resignó desde el minuto uno a aguantar el resultado como pudiese. El Millonario generó una gran cantidad de situaciones que no pudo -ni supo- traducir en gol.
El primer dolor de cabeza para el conjunto de Almeyda no vino de la mano de ninguna actuación descollante de los jugadores de La Crema. A los 11 minutos de la primera etapa, Germán Pezzella y su rodilla quedaron clavados en el piso y no pudieron ponerse de pie. River perdió un jugador muy importante en defensa, nuevamente por una lesión ligamentaria en la rodilla que llama la atención por su reiteración en el corto plazo.
En la síntesis del partido, el Millonario triplicó a Atlético Rafaela en situaciones. Fue el claro dominador del encuentro, pero le faltó claridad en los últimos metros. La figura excluyente fue Leonardo Ponzio, una constante en este equipo de Almeyda que domina pero no lastima y deja puntos en el camino que pueden ser claves en un futuro.
