La Octava del Luigi Villalba derrotó a Rosario Central en Ingeniero Baigorria y se quedó con otro título para las inferiores millonarias. Pese a un trámite parejo, se impuso por 3 a 1 gracias al doblete de Emanuel Ventos y el tanto de Franco Petracca Lepera.
El grito desenfrenado del final fue el desahogo merecido de los chicos de la categoría ’97, que tuvieron que luchar y jugar con el cuchillo entre los dientes para quedarse con otra corona, como aquélla que consiguieron en cancha de Deportivo Español en el 2008 contra Argentinos Juniors, cuando apenas estaban dando sus primeros pasos en Infantiles.
Esta vez, los rivales fueron Rosario Central y Newell’s Old Boys. El «Canalla» era el adversario en el campo de juego. La «Lepra» eran los escoltas en la tabla de posiciones. Y lejos de las suspicacias y la mugre que rodea al fútbol profesional de Primera División, los chicos de Central jugaron una verdadera final y le complicaron a River las cosas más de la cuenta, que se puso arriba en el marcador gracias a un gol de Emanuel Ventos. Aunque los locales, antes del final de la primera etapa igualaron y le dieron al segundo tiempo un condimento dramático.
En el complemento, los nervios y la tensión jugaron decididamente su partido. Sin embargo, River sostuvo su arco desde la enorme tarea de Cajal y la solidez defensiva. Cuando hubo que poner temple, apareció el corazón y la sangre de estos chicos, que lucharon todo el año para lograr el objetivo. Primero Emanuel Ventos y sobre el final Petracca Lepera sellaron el 3 a 1 definitivo y la felicidad absoluta de un equipo que con mucho sacrificio y empeño gritó «dale campeón».
