(INCLUYE VIDEO) Como en el último Mundial con la camiseta de Colombia, Teo volvió a marcar en el mítico Mineirão, esta vez con la banda roja en el pecho. Además, dio la asistencia en el primer gol del millonario y jugó su mejor partido en esta Copa.
En la previa del choque ante Cruzeiro, Teófilo Gutiérrez tenía motivos para aferrarse a los antecedentes. Es que de los once titulares, era el único que sabía lo que significa anotar en el mítico Estadio Mineirão. Claro está que el único gol que había marcado allí fue con la camiseta de la Selección Colombia en la última Copa del Mundo disputada en Brasil.
Más allá del dato estadístico, el costeño tenía una cuota pendiente con el millonario: por certámenes internacionales sólo había marcado un gol. Fue en esta edición de la Copa Libertadores, ante Tigres en Monterrey. Con aquél tanto River comenzó a abrir esa pequeña ventana que le permitió clasificar a la siguente fase, sin sobrarle nada. Pero era muy poco para un delantero del prestigio y el renombre de Teo.
Sin embargo, esta noche en Belo Horizonte el atacante colombiano apareció en toda su dimensión. Participó del circuito futbolístico, ofreció su sacrificio pero también todo su talento. Junto con Rodrigo Mora fueron una pesadilla para la defensa de Cruzeiro, que no supo contrarrestar las diagonales y la movilidad de ambos delanteros. Para coronar su noche soñada, asistió a Sánchez en el primer tanto del encuentro y convirtió el suyo y el tercero de River para abrochar una clasificación histórica, con una actuación consagratoria y largamente esperada.
