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IMAGEN: Prensa River
IMAGEN: Prensa River

Marcelo Barovero (9): Mantuvo el cero y además, tuvo varias atajadas que fueron importantísimas. Además, salió siempre bien y dio confianza en todo momento. Su único error vino en un saque de arco.

Camilo Mayada (4): Nadie duda que es un jugador hábil y con muy buena habilidad, pero como venimos notando desde el comienzo del torneo, esta posición no es para él. Por su lado vinieron todos los ataques del rival. Se entiende que no estuvieron ni Mercado ni Mammana, pero con un rival superior su lado hubiera sido un festín: el uruguayo no siente la marca. Hizo un gol. Interesante en ataque.

Jonatan Maidana (6): Un partido muy difícil para el central, que se las arregló para ganar en la mayoría de las ocasiones. Si bien no siempre se impuso ante Ruben o Cervi, logró embarullar aquellas acciones en las que no pudo salir airoso en primera instancia. Lo atacaron mucho y en gran mayoría, ganó.

Ramiro Funes Mori (5): Una actuación con muchos ingredientes. Es obvio que juega muy inteligentemente y sabe donde están los árbitros. También, comete muchos errores en pases y en quites, que en algún momento puede ser negativo para el equipo, aunque también tiene momentos de gran claridad, con buenos quites e interesantes subidas.

Leonel Vangioni (6): Tuvo bastante trabajo por su andarivel, ya que Central trató de atacar por ambos costados. Por eso mismo no pudo subir mucho, pero lo que es cierto es que los rivales no lograron superarlo y ganó en la mayoría de los encuentros. Como siempre, fue abajo con fuerza cuando el partido lo ameritó.

Leonardo Ponzio (6.5): Estuvo en todos lados, un general de la cancha. No mostró la misma presión alta que en otros partidos anteriores, pero fue muy importante en la recuperación, además que fue muy inteligente para cubrir espacios cuando otros se equivocaban. Su rendimiento superior ya no es sorpresa.

Matías Kranevitter (6): No estuvo tan lúcido como en otros partidos, y el rival lo probó bastante, pero aún así salió airoso de la mayoría de las situaciones y fue un gran lugarteniente de Ponzio. Peleó, luchó y supo entregar el balón con claridad.

Ariel Rojas (6): Alguno dirá que tuvo demasiadas imprecisiones: es verdad, Ariel siempre trató el pase punzante, el pase difícil y no siempre le salió. Uno de esos pases encontró a Pisculichi, desde lejos; y éste encontró a Teo para el gol. Desde los detalles se ganan los partidos. Y Rojas es el rey de eso.

Leonardo Pisculichi (6): Demostró varios destellos de aquél que ilusionó a tantos hinchas el semestre anterior. Exquisito el pase a Teo para el primer gol. Luego tuvo algunas apariciones pero sin tanta suerte.

Fernando Cavenaghi (4): Un muy pobre primer tiempo, donde estuvo ausente, seguido por un mejor segundo tiempo, donde pivoteó y fue parte del circuito ofensivo. Igual, se espera más de él.

Teo Gutiérrez (7): A Teo sólo le hacen falta momentos para mostrar su gran jerarquía, superior a la mayoría del fútbol argentino. Cuando lo hizo, marcó un gol. Además, se juntó bien con Rojas y Pisculichi, y pudo ampliar.

Ingresaron:

Lucas Boyé (6.5): Entró bastante enchufado, y si bien mantuvo su mala suerte para el gol en la pelota que estrelló en el palo, Mayada metió el gol. Además, se juntó bien con Aimar, Solari, y Teo.

Augusto Solari (5.5): Entró para darle un poco de aire al equipo y cumplió a medias. Subió y trató de ser parte del circuito ofensivo.

Pablo Aimar (7): Le bastaron sólo 15 minutos para demostrar que era diferente al resto. Toques de clase, jugadas de distinción, momentos de jerarquía. Ojalá aquella habilitación a Boyé de taco y sombrero hubieran terminado en gol. Ya habrá más oportunidades para ver su maestría.

Marcelo Gallardo – DT: La inclusión de Mayada de lateral derecho fue un error, nuevamente, como tantas otras ocasiones en este semestre. Se entiende que Gallardo no tenía muchas otras opciones por ese lado, con las bajas de Mercado y Mammana, pero las deficiencias defensivas de Camilo son muy obvias, algo que venimos apuntando desde el comienzo de la temporada: cada vez que el uruguayo jugó de 4, pasó vergüenza. Por suerte, River mantuvo el arco en 0. Cavenaghi quizás tendría que haber salido antes y Aimar ingresado antes, pero River ganó, ante un equipo difícil y eso es muy importante.