El plantel millonario regresó al país, luego de un viaje que sufrió demoras y produjo fastidio en cuerpo técnico, jugadores y dirigentes. Ahora, a pensar en el Rojo.
Doce horas más tarde de lo previsto, el plantel millonario regresó al país, luego de uno de esos viajes incómodos y cansadores. ¿El motivo? El chárter que transportaba a la delegación de River no tenía algunos papeles al día y, por lo tanto, no pudo despegar en tiempo y forma de Maracaibo para retornar de inmediato a Buenos Aires, tal como había planificado el cuerpo técnico.
El dato de color fue la intervención de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, quien intervino directamente en el asunto para autorizar el vuelo. A esa altura, la calentura del cuerpo técnico, los futbolistas y los dirigentes superaba las altas temperaturas de la noche anterior en la localidad de Valera.
Más allá de la incomodidad, el campeón de América aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza cerca de las 23 horas. Sin tiempo para el lamento, el Más Grande regresará a los trabajos este sábado por la mañana en el predio bonaerense, ya con la cabeza puesta en el clásico del lunes ante Independiente en el Monumental.
