En diálogo con LPM RADIO, Norberto Alonso recordó su despedida en un Monumental repleto y aseguró que fue el único partido que le temblaron las piernas. Por su parte, contó cómo fue su experiencia como manager del club, pero evitó polemizar con el actual Secretario Técnico y el entrenador de La Banda: «Si hablo siempre se enoja alguno», ironizó.
El 13 de junio no es un día más en el calendario del club más grande de esta parte del mundo. Es que Norberto Osvaldo Alonso, una de las glorias máximas de la institución, colgó los botines y le dijo adiós a la pelota, pero nunca a su pasión por River.
Veintinueve años después, el Beto recordó aquella jornada inolvidable: «Ese día se te nubla todo. El partido previo fue entre un equipo de River y San Miguel, en el que jugaron mis dos hijos. Yo quería que me jugaran en serio. Algunos vinieron de Europa. Me acuerdo que en el primer tiempo me fui para el vestuario y dije ‘me voy porque esto se me va a hacer muy duro’. A tal punto que el único partido que me temblaron las piernas fue en ese partido. Cuando salí del túnel y vi a tanta cantidad de gente, el estadio colmado, el día más frío del año…y vinieron todos. Me preguntaba ‘¿toda esta gente vino para verme a mí?’. La verdad, soy un eterno agradecido a la vida», resaltó el ídolo millonario.
En cuanto a los entretelones de la despedida, Alonso reconoció que la idea de retirarse de la práctica profesional comenzó a tomarla en Tokyo, luego de ganar la Copa Intercontinental: «Había tomado ya el 50% de la decisión en Japón. Cuando se me pasó un escalofrío por el cuerpo y dije ‘bueno, se está terminando una parte de mi vida’. Ahí empezó a tejerse la parte del retiro. Después cuando vine a Buenos Aires ya tomé totalmente la decisión y dije ‘ya está, di todo, ¿qué más puedo dar?’. Dejó todo adentro de la cancha. Y lo digo con mucho respeto: nací ganador y me fui ganador», señaló.
Alonso, Francescoli y Ortega son los únicos privilegiados que tuvieron su despedida en el estadio Monumental. En la semana, Fernando Cavenaghi admitió que no se siente merecedor de un partido como tal. El Beto tomó distancia del Torito y afirmó: «Yo creí que me la merecía. Si él no lo cree, es un problema de él…no solamente me creía merecedor, sino también me creo merecedor de otras cosas que hoy no las tengo», apuntó el Capitán Beto.
Consultado sobre los alcances del management deportivo, el ex-enganche de La Banda recordó su tarea durante el mandato de Osvaldo «Titi» Di Carlo: «Puedo hablar sobre lo mío, sobre los demás no voy a hablar. Cuando fui manager iba a ver mucho las divisiones inferiores, hablaba con los jugadores. Cuando lo traje a Mostaza Merlo, la dirigencia me permitió hacerme cargo de todo el fútbol de River, realmente le iba indicando los jugadores», indicó en diálogo con LPM Radio.
Al ser consultado sobre la actualidad del plantel profesional, el Beto prefirió tomar distancia y evitar polémicas con el actual Secretario Técnico y el entrenador del club: «No voy a hablar porque si hablo siempre se enoja alguno. No quiero que se enoje nadie. Hay un gran técnico, él va a decidir quién viene y quién no». Y en forma irónica, agregó: «No me pregunten de River, preguntame de otro equipo…si estamos hablando de fútbol, nadie se tiene que sentir ofendido por lo que digo, porque lo hago de buena leche. Lo que pasa es que en este país no les gusta que hable o diga lo que uno siente después de tantos años de jugar en Primera», concluyó.
