Hace 85 años se jugaba el primer superclásico del profesionalismo. ¿Cómo terminó? A las piñas y suspendido.
Si bien el primer superclásico de la historia lo ganó River 2-1 en el 1913, el primero del profesionalismo terminó a las piñas, literalmente, en una rivalidad que data de más de un siglo. Y ya desde esos tiempos los arbitrajes en favor de los de la Ribera eran cosa común, algo que los jugadores de River no tomaron con liviandad. Incluso el partido de la Reserva no concluyó, ya que luego de una feroz patada del jugador de Boca Strada a Ganduglia de River, éste tuvo que salir de la cancha con el rostro ensangrentado, lo que hizo que se pelearan jugadores de ambos equipos y que el árbitro suspendiera el partido (Strada luego nunca logró ser titular en la Primera de Boca, y Ganduglia pasaría años más tarde a Boca, en el ’34).
Cerca de 50.000 personas habían acudido al viejo estadio de Boca. Al ver que el encuentro preliminar se daba por terminado luego de la pelea entre jugadores, los hinchas de Boca trataron de incendiar su propio estadio. Por eso, el partido de la Primera División tuvo que adelantarse.
En el primer tiempo, a los 16 minutos, Camillo Bonelli se le anticipó a Vargas, y dribleó a cuatro jugadores boquenses antes de mandar el centro, que luego de una pifia de Marassi, Peucelle la empalmó con alma y vida para el gol. Sin embargo, Boca mejoró en su fútbol y a los 28 minutos el árbitro cobró un muy discutido penal, que enfureció a los jugadores de River. Jorge Iribarren, de cualquier manera, le tapó el remate del penal a Varallo, aunque no pudo contenerlo, y Varallo tuvo tres oportunidades más para inflar las redes del millonario. La tercera fue la vencida.
Enseguida, los jugadores de River increparon al árbitro, ya que consideraron que había sido primero offside y luego foul a Iribarren en la segunda oportunidad de gol de Varallo. Además, ya se sentían despojados por el penal que consideraban que no era. El árbitro decidió expulsar a 3 jugadores de River (¡sí, 3!): Bonelli, Lago y Benavides, argumentando que lo habían pateado. Los jugadores de River se negaron a salir del campo de juego, y el partido no continuó. Los 3 jugadores de River terminaron arrestados y días más tarde, el Tribunal de Penas le dio la victoria, en el escritorio, a Boca por 1-0. H
asta el 2010 por causa de un diluvio, este había sido el único partido suspendido entre los dos máximos rivales del deporte mundial. Luego llegaría el famoso partido del gas pimienta.
