River goleó a Olimpa de Paraguay en La Plata y se quedó con la Copa Conmemoración. Alonso, Villalba (en contra), Martínez Quarta, Rodríguez y Alario anotaron para el elenco del Muñeco, mientras que Bareiro marcó el único tanto del equipo guaraní.
El estadio Ciudad de La Plata fue el escenario elegido para disputar la Copa Conmemoración. Una excusa perfecta para darle minutos y rodaje a futbolistas que habitualmente no suelen tenerlos. Y al menos en el caso de River, la apuesta salió a la perfección.
En la primera etapa, el conjunto de Marcelo Gallardo se puso en ventaja a los 5 minutos de juego. La jugada nació en los pies de Lucas Martínez Quarta, con un pase largo que peinó Marcelo Larrondo hacia la derecha. Allí apareció Rodrigo Mora, que envió el centro para que Iván Alonso anticipara a todos y de cabeza anotara el primer tanto de la noche.
Más allá del control y el dominio del partido, River volvió a sufrir desde la pelota parada. A los 37, luego de un tiro de esquina, Fredy Bareiro cabeceó en el área chica ante las narices de Enrique Bologna, ante la asombrosa pasividad de la defensa millonaria.
En el complemento, la historia iba a ser otra. De entrada, ya a los 4 minutos, el que aprovechó el balón detenido fue el Más Grande. Desde la otra esquina, el que envió el centro fue nuevamente Mora, pero el que anticipó a todos fue Gonzalo Montiel. La pelota desvió su trayectoria en Hernán Villalba y se coló en el primer palo del arquero guaraní.
Luego de ahí, llegó una ráfaga de fútbol y goles. A los 9, tras un centro pasado de Nico Domingo, otra vez apareció Mora, el hombre de ataque que se puso el traje de asistido, para habilitar de cachetada a Lucas Martínez Quarta, que entró solo y de «palomita» envió el esférico al fondo del arco.
Cuatro minutos más tarde, el que apareció fue Denis Rodríguez, para presionar en la salida rival y luego clavar la pelota en el ángulo, con una sutileza que emuló los mejores tiempos de Marcelo Gallardo con la #10 en la espalda.
El broche de oro llegó a los 33 minutos, con Lucas Alario ya en cancha. Nacho Fernández metió un bochazo en posición de lateral izquierdo y habilitó al Pipa, que aprovechó el desorden de la defensa paraguaya y definió ante la salida del arquero.
Así, River construyó una goleada clara y contundente, que servirá -y mucho- para que Marcelo Gallardo pueda sacar conclusiones y encontrar soluciones en el semillero y en aquellos que hoy esperan desde afuera.
