La dirigencia millonaria emitió una carta intimidatoria hacia el Bayer Leverkusen, amparada en los artículos 16 y 17 del Reglamento de Transferencia de Jugadores. Si en el plazo de 24 horas no responden a lo solicitado, el millonario presentará una denuncia en la FIFA.
En River vuelan de la bronca. Y no es para menos. Todo el affaire por la posible partida de Lucas Alario generó un malestar generalizado en los pasillos del Monumental. A tal punto que las frases más escuchadas en los despachos del presidente Rodolfo D’Onofrio y de sus colaboradores fueron «ir a fondo» y «no la van a sacar barata» en las últimas horas.
Luego de un lunes demasiado movido, que comenzó con una serie de llamados a la dirigencia de Colón y el envío de un escribano a la Clínica Rossi para constatar la revisión médica que estaba realizándose Lucas Alario sin autorización de la institución millonaria, sobre el cierre del día el club emitió un comunicado de prensa que incluyó una carta dirigida al Bayer Leverkusen, con copia a la Federación Alemana de Fútbol, a la Conmebol, la UEFA y a la Asociación del Fútbol Argentino.
Con una serie de argumentos amparados en reglamentos y estatutos de la FIFA, el Más Grande intimó al club alemán para que «desistan de su accionar tendiente a la ruptura anticipada del contrato laboral que vincula al jugador Lucas Alario con el Club Atlético River Plate, en los términos de los arts. 16, 17 y ccs. RETJ, y la imposición de las sanciones deportivas a su club que corresponden conforme al art. 17.4 y normativa de aplicación».
Además, la dirigencia de La Banda resaltó que si en el plazo perentorio de 24 horas no desisten de la operación, River presentará la denuncia ante la FIFA. El millonario irá hasta las últimas consecuencias.
