En un partido que en los papeles parecía más accesible, a River le costó y por penales derrotó a Gimnasia, 5 a 4 en Villa Mercedes (San Luis)
En la primera mitad se vieron dos equipos claramente definidos. El Más Grande, pese a tener la pelota y controlar el juego, no lograba profundidad. Tanto Nacho Fernández, como Exequiel Palacios no pudieron conectarse con los delanteros, mientras que los laterales no tuvieron un buen partido, sufrieron mucho el retroceso y erraron mucho la culminación de las jugadas en ataque. Sumada a la pronta lesión de Ponzio, dejaban muchas dudas en relación a los que se veía en ese primer tiempo.
La primera clara de la noche fue para los mendocinos a los 4 minutos. Su número 10 Carrizo le ganó la disputa de la pelota en la puerta del área a Leo Ponzio y se puso mano a mano con el 1 de River, que le achicó el arco haciendo la de Dios.
River monopolizaba la posesión de la pelota pero no lograba tener profundidad y cada ataque se diluía en la puerta del área rival. Tuvo una clara en los pies de Julián Álvarez, que definió de pique al suelo, pero el defensor alcanzó a sacar sobre la línea.
El complemento fue más de lo mismo. Los de Napoleón teniendo la pelota, pero sin lastimar a un rival que le planteaba un partido incómodo y que a través de las contras se acercaba con peligro al arco de Lux. Tal es así que en un pelotazo al sector izquierdo de la defensa de River, el puntero derecho de Gimnasia superó a Angileri, que lo derribó dentro del área y Andrés Merlos no dudó en cobrar penal. Pena máxima, que Lux de gran noche contuvo con los pies.
Minutos más tarde llegó el desahogo del millonario. El juvenil Rollheiser remató de volea a media altura y Exequiel Palacios alcanzó a desviar de cabeza, descolocando a Marchiori, para poner en ventaja a los dirigidos por el Muñeco.
Cuando parecía que luego del gol River manejaría la pelota y controlaría el partido, en una desatención de Pinola, tras la ejecución de un córner, Renzo Vera cabeceó solo en el vértice de área chica y venció al arquero millonario, de floja respuesta.
El empate se mantuvo hasta el final. River fue más desesperación que fútbol y quedó muy mal parado en líneas defensivas, lo que permitió algún susto de contra, que los cuyanos desperdiciaron o no supieron resolver.
El resultado marcó un empate que estaba bien para lo que fue el contexto. El Millo manejó el partido y Gimnasia las más claras. Lo penales, como siempre, son una lotería. River convirtió todos los que le tocó patear, mientras que Gimnasia, a través de Andrada, estrelló el cuarto en el horizontal.
De este modo, el millonario avanzó y se verá las caras con Godoy Cruz por los octavos de final, con día y horario a confirmar. Además, cosechó un ingreso de $1.180.000 por pasar de fase.
Se viene Cruzeiro la semana próxima por Copa Libertadores y se recuperarán varios soldados. River deberá mejorar y mucho de acuerdo a lo mostrado en Copa Argentina.
