(INCLUYE VIDEO) Marcelo Gallardo se mostró feliz por la obtención de la Supercopa Argentina y su 12° título como entrenador de River, pero mucho más por las formas y el buen juego que mostró su equipo. Además, resaltó la convivencia que hay dentro del grupo y el apoyo que brindaron los hinchas santiagueños en la previa de la final.
El Millonario goleó a Racing en Santiago del Estero y se quedó con la Supercopa Argentina. Es el 12° título oficial de Marcelo Gallardo como entrenador de River. Tras el triunfo y el festejo, el DT del Más Grande analizó el desarrollo del partido y dimensionó cuál es el lugar que ocupa esta nueva vuelta olímpica: «Siempre son importantes porque no se juegan finales todos los días. Si bien estaba postergada desde hace un tiempo, había que prepararse nuevamente para ver si podíamos llegar bien. Era el inicio de la temporada, jugamos cuatro partidos y el equipo hoy apareció de nuevo, con funcionamiento y buena calidad de juego. Enfrentamos a un equipo que fue difícil, en la primera etapa fue un partido muy parejo. Más allá que nosotros tuvimos una idea clara, un tiro en el palo podría haber puesto a Racing en el partido. Después en el segundo tiempo encontramos los espacios y fuimos muy eficaces», indició Napoleón.
En diálogo con ESPN, el entrenador de River reveló por qué se abrazó con Enzo Pérez luego del segundo tanto: «Hizo una jugada espectacular. Es un poco lo que representa el equipo, eso nos da un volumen de juego, una actitud muy marcada de lo que es el equipo en cuanto a las formas. Me di un abrazo con él porque justo hizo esa jugada espectacular para el gol. Sería muy injusto no saludar con la misma importancia a todos por que jugaron un gran partido en todas las líneas», explicó.
Más allá que la final no contó con público en las tribunas por la pandemia, el técnico de La Banda no se olvidó de los hinchas y agradeció el apoyo que recibieron desde que llegaron a Santiago del Estero: «Les decía a los chicos antes de salir al campo que hay veces que uno tiene que tener en cuenta lo que representa esta camiseta para la gente. Lo que vivimos desde el hotel hasta la llegada al estadio, con la gente saliendo a la calle, fue una cuestión muy emotiva, que gente que no está acostumbrada a ver a River acá en Santiago como nos pasa en cada una de las provincias a las que vamos te demuestren esa pasión solamente por ver pasar el micro…les decía que jueguen por esa gente también, que sufre mucho y que estas pequeñas cosas futbolísticas les dan muchísima felicidad. Los jugadores se brindaron por esa gente y por toda la gente de River», afirmó.
¿Imaginabas que ibas a llegar al 12° titulo como entrenador de River? «Pensar que se iba a lograr todo lo que se logró en estos años era un sueño. Cuando llegué al club lo único que tenía era el deseo de hacer las cosas bien en una institución que me había dado mucho. Fueron pasando los años y los equipos que hemos ido constituyendo y los jugadores nos han representado en casi todas las etapas, en mayor o menor medida ha sido una representación enorme hacia el hincha de River y la institución. Más después de los triunfos y los campeonatos, que quedan en la historia del club. Más allá de esta gestión, hay que valorar que no nos hemos detenido en la apuesta de seguir mirando hacia adelante y no detenernos. Hay un espíritu que se ha mantenido y eso es importante destacar», aseguró el Muñeco.
«No hubo mucha competencia el año pasado, se terminó este año. Estuvimos muy a la altura de las competencias que hemos jugado, en las dos, en el campeonato local y en la Copa. Fuimos muy competitivos, estuvimos a nada de poder jugar una nueva final de Copa Libertadores, que no es fácil. Este título se tendría que haber jugado el año pasado, lo jugamos ahora, a principio de temporada. No era fácil llegar bien, afilados a este partido. Los primeros partidos nos sirvieron para ir soltándonos y mostramos un caudal futbolístico muy importante», agregó el DT.
Consultado por el ingreso de Julián Álvarez y la molestia de Rafael Borré, el Profe admitió: «El partido creo que lo planteamos bien, el primer tiempo. Ya con la ventaja y con las piernas más cansadas, sabiendo que Racing iba a salir a buscar el empate en un momento, nosotros teníamos que aprovechar los espacios. Rafa hizo un gran esfuerzo, estaba bastante sentido antes de empezar. Lo pudo soportar bien y ya lo tenía a Julián preparado para aprovechar esos espacios. Entró de muy buena manera. No había jugado un buen partido el domingo contra Platense, pero hoy entró y lo hizo de muy buena manera. Es un joven jugador con mucho potencial y hoy demostró que está para seguir creciendo», resaltó.
Por su parte, insistió en el buen juego que mostró su equipo más allá del resultado final: «Es lo que representamos en este club, las formas interesan y mucho. Por más que se diga que las finales hay que ganarlas como sea, en algunos momentos cuando las ganás no jugando bien te dan felicidad igual porque es un título. Me voy mucho más feliz cuando el equipo funciona como se viene jugando últimamente, más allá de algunos detalles que nos perjudicaron», reconoció.
¿Cuál es la clave para sostener durante tantos años ese espíritu competitivo? «Somos un gran equipo, somos un grupo de personas, de jugadores, cuerpo técnico, colaboradores que realmente convivimos de muy buena manera. Hay una buena energía, se nota cuando juega el equipo. Eso nos representa. Enzo hizo un esfuerzo este año para quedarse, sentía que se tenía que quedar y nosotros la necesitábamos también. Esta gran victoria hace que ese abrazo es un mimo a todo el esfuerzo que vienen haciendo», subrayó.
Para finalizar, se refirió a la actualidad del fútbol argentino y explicó por qué River parece una excepción al desorden generalizado: «No puedo opinar con lo que pasa en otros clubes, la verdad que no lo puedo hacer por una cuestión de respeto. Sí te puedo hablar de lo nuestro, de lo que representa para nosotros poder sostenernos en el tiempo, no es fácil tiempo. Cuando no conseguís objetivos te empiezan a cuestionar, pero pocas veces se muestra como una virtud las formas. Y a nosotros nos ha tocado ganar y perder, pero no han cambiado nuestras formas. Eso en un fútbol argentino tan dañino, de tanta crítica y exigencia extrema, sostenernos en el tiempo nos da muchísima felicidad, pero también cuesta mucho porque la vara te la ponen cada vez más alta. Más allá de ganar o perder, me interesa ser un equipo que a nosotros y al hincha lo represente. Eso para mí es motivo de orgullo», concluyó.
