Alan Leonardo Díaz debutó en el arco del Más Grande con una actuación sobresaliente en la Bombonera. Le tapó tres remates a Carlos Tévez y le contuvo un penal a Edwin Cardona. No alcanzó para la clasificación, pero fue la gran figura del superclásico.
Lo anheló mil veces. Y de tanto empujar, la chance llegó. Alan Leonardo Díaz, el arquero juvenil que todavía no sumó minutos en la Reserva de River, hoy cumplió el sueño del pibe: debutó oficialmente en la Primera de River, nada más y nada menos que en un superclásico y en el estadio del eterno rival.
El clásico no arrancó como hubiese querido Leo. A los 10 minutos, el local se puso en ventaja a través de un cabezazo de Carlos Tévez que dio la sensación que pudo hacer algo más. Es cierto que hay falta del delantero boquense en el inicio de la jugada. Y el atenuante de un efecto extraño que toma la pelota cuando impacta parcialmente en el hombro. De ninguna manera es para cuestionar al pibe del Millo.
Lo mejor del #32 de River llegó en el complemento. El juvenil se agigantó bajo los tres palos y contuvo tres remates de Carlos Tévez. La última, casi sobre el pitazo final. No fueron sus únicas intervenciones. En la definición por penales, le contuvo un penal a Edwin Cardona, que intentó picársela y terminó entregándole el balón manso a las manos del guardametas.
No alcanzó para la victoria y la clasificación, pero Alan Leonardo Díaz tuvo una presentación para destacar. No sólo recibió los elogios de su entrenador Marcelo Gallardo, sino también de los futbolistas rivales. Hasta el Pato Fillol expresó su beneplácito por la actuación del portero en las redes sociales. Un debut que no olvidará jamás.
