El Millonario derrotó a Independiente en el Monumental, alcanzó a Newell’s en la punta hasta que juegue con Unión y dejó al «Rojo» al borde de la B Nacional. Final de torneo apasionante.
Con un Monumental repleto, los dirigidos por Ramón Ángel Díaz se impusieron 2 a 1 en un vibrante encuentro contra Independiente. Los goles millonarios fueron convertidos por Juan Manuel Iturbe y Manuel Lanzini, mientras que Daniel Montenegro descontó sobre el cierre para la visita.
En la primera etapa, River daba la sensación de haber ingresado tan desconcertado como en el segundo tiempo en La Paternal. De hecho, los dirigidos por Miguel Brindisi tuvieron la primera y más clara del partido en los primeros minutos, cuando Hernán Fredes quedó solo frente a Barovero pero su débil cabezazo fue a parar a las manos del arquero local.
La imprecisiones de River era alarmantes. Sin embargo, la fortuna jugó a favor del Millonario, que luego de una serie de rebotes en el área quedó Iturbe en situación inmejorable para definir ante la salida de Rodríguez y abrir el marcador en la primera clara que tuvo el conjunto de Núñez. A partir de ese momento, el partido cambió radicalmente. Los dirigidos por Ramón se tranquilizaron, comenzaron a hacer circular mejor el balón y a jugar con la desesperación de un Independiente desahuciado.
En el complemento, River enhebró una muy linda jugada que culminó con un gran desborde de Iturbe y una muy ajustada definición de Lanzini para sentenciar definitivamente la historia. River apostó al contraataque mientras Indepediente moría en la impotencia. Solamente el gol del «Rolfi» sobre el cierre del cotejo puso en duda una victoria que hasta los 44 minutos del segundo tiempo era muy clara.
Ganó River y es lo importante, porque recompuso la pálida imagen que había dejado frente a Argentinos Juniors. Ganó el equipo de Ramón y dejó al Rojo al borde de un descenso histórico. Pero lo más importante de todo es que ganó River y sigue apostando a dar una nueva vuelta olímpica. Y no es poca cosa.
